Informe de la Bolsa de Rosario. PUNTO BIZ.

Las lluvias hicieron mejorar las expectativas de los productores en cuanto a la siembra de soja (que se demoraba por la falta de agua) y la cosecha de trigo (que la necesitaba para completar su floración), según informaron desde el departamento de estimaciones agrícolas de la Bolsa de Comercio de Rosario. Las precipitaciones, aunque no fueron uniformes, cambiaron el humor de los productores luego de sufrir el embate de las altas temperaturas que paralizaron la cosecha la semana pasada.

Las lluvias registradas durante el fin de semana fueron generalizadas en toda la región núcleo, destacándose los mayores acumulados en las localidades de Ramallo con más de 150 mm, Bigand con 120 mm, Chovet con 119 mm, Iroyen y Alvarez con 110 mm. También se destacan las localidades de Pergamino, Labordeboy, Rosario y Pujato con marcas de 100 mm. Además de las lluvias, también se registraron intensos vientos.

De acuerdo a los registros de GEA, si estas lluvias se analizan en el contexto de la pluviometría anual de este año, se observa que ya se superaron los 1500 mm. La localidad de Ramallo encabeza la lista con 1600 mm acumulados en lo que va del año. Le siguen muy cerca Pergamino y Santa Teresa con acumulados en el orden de los 1400 mm. Buena parte del este bonaerense y sur de Santa Fe muestra acumulados en la franja 1200 a 1350 mm, como se observa en el siguiente gráfico.

En el caso del sur de Santa F e y el oeste cordobés, no hubo problemas de napas altas; sin embargo, preocupa mucho la inestabilidad de clima. “En esta oportunidad no hubo problema de napas, pero hay muchas incertidumbres en el agro, porque en cuestión de dias pasamos de calor a lluvia. De todas maneras, siempre se prefieren los porblemas de agua a no tenerla”, resaltó Cristián Russo, de la Bolsa de Comercio de Rosario.

Sin dudas, estas lluvias son fundamentales, inclusive en la zona cordobesa donde tambien se concentraban algunos inconvenientes para la proxima cosecha. Tal es el caso de la zona núcleo, en donde las ultimas dos semanas con altas temperaturas, se habia avanzado muy poco en la siembra de soja. “Se avanzó muy poco, se paró todo y habia preocupacion por lo que podia pasar, pero afortunadamente vinieron las lluvias, aunque de manera muy intensa y eso encendió el alerta en el clima”, señaló el especialsita.

“Las lluvias que se preveían para el lunes pasado (27/10) se retrasaron en gran parte de la región central. El volumen de agua que se esperaba se descargó anticipadamente en la provincia de Buenos Aires ocasionando serios problemas de inundaciones que dejaron severos daños en áreas urbanas y rurales”, señala el informe.