04/09/2014

Técnicos dejan recomendaciones para el manejo del cultivo de maíz

El maíz es considerado un cultivo muy susceptible a restricciones hídricas, por lo que se lo suele restringir a los mejores ambientes o lotes. NAP

ROSARIO (NAP) Bajo la consigna “Una mirada de alta definición”, se inició este miércoles la X Edición del Congreso Nacional de Maíz, organizado por la Asociación de Ing. Agr. del Norte de Buenos Aires, que se extenderá hasta el próximo viernes con la participación de numerosos especialistas de Argentina y del exterior.

La apertura del encuentro que se llevo a cabo en el auditorio de la Bolsa de Comercio de Rosario, estuvo a cargo del presidente del Congreso, Ing. Agr. Alfredo Cirilo, quien tras dar la bienvenida a los asistentes destacó la importancia de los expositores, pero sobre todo la calidad de los disertantes, que abordaran diferentes aspectos referidos al cultivo del maíz.

Este cultivo es clave en un momento en que el mundo demanda una mejor calidad de dieta, por la influencia que tiene en la vida alimentaria de la población y de los animales, además de la relevancia que adquiere como insumo para la producción de biocombustibles y tener un efecto virtuoso en los suelos.

Una de las primeras presentaciones estuvo a cargo de Patricio Grassini, de la Universidad de Nebraska, Estados Unidos, quien se refirió a las brechas que existen entre los rendimientos potenciales y reales obtenidos por el productor y expuso algunas herramientas que no son de difícil aplicación para el manejo del cultivo, que están disponibles, a partir del empleo de diferentes tipos de híbridos, de acuerdo a los ambientes.

Disertó además sobre un Atlas de rendimiento global que se lleva a cabo para todas las zonas maiceras mundiales y que toma en cuenta la intearcción de los diferentes genotipos y ambientes productivos.

En otro momento de la jornada, el Dr Alberto Quiroga se refirió al manejo de agua en ambientes frágiles de este cultivo y planteó el desafío que significa para la agronomía, saber que capacidad de almacenamiento de agua de lluvia tenemos en función del espesor del suelo y puso como ejemplo la situación generada en zonas de Huinca Renancó o Saliqueló, donde llovieron 200 MM de agua y el productor se pone contento, sin embargo, esa lluvias necesita tres metros de suelo para usarse, si no disponemos de esa profundidad y sembramos un maíz de ciclo medio corto, no aprovecharemos los 200 que dice el pluviómetro, sino que solo estarán disponibles 80 MM”

“Entonces no estamos usando esa información, sincronizamos mal y hay mucho desfasaje. No aprovechamos lo que el cultivo nos permitiría trabajar y acoplarlo a la humedad que se aloja en el suelo”, resumió Quiroga

Por su parte el Ing. Mario Vigna del INTA Bordenave dejó algunas recomendaciones para los productores en el manejo de las malezas y en ese sentido sugirió reconocer el tipo de especies que el productor tiene en el lote: “No hay que realizar esta tarea pocos días antes de arrancar con la siembra. Se debe tener en cuenta que el cultivo yo lo pongo cuando quiero, la maleza está presente siempre. Por lo tanto cuando se toma la decisión de realizar la práctica agrícola, debe determinarse la historia del lote”

“En función de esos resultados uno debe actuar sobre las malezas cuando están en estado pequeño, se pueden usar herramientas más baratas y más eficientes y no esperar el momento para salir a apagar incendios”.

Otro aspecto que sugirió en materia de control de malezas es que el uso de las mezclas clásicas al que está acostumbrado a usar, no es la única herramienta, el problema se debe mirar un poquito más allá, detectar las especies y las problemáticas que tiene en el lote, estimar cuando va a nacer y evaluar cuando va a tener el principal problema y ahí, empezar a elegir el herbicida residual, el pre emergente o el post emergente”.

A su turno Anibal Cerrudo del INTA Balcarce expuso sobre Maíces en cultivos sobre ambientes con restricción hídrica que se suele dar en amplias regiones de la Argentinas y por eso no entra en rotación por el estrés hídrico, porque a veces hay poca capacidad de almacenaje de agua en el suelo o que estén degradados.

Cerrudo explicó que” la interacción entre momento., duración e intensidad del estrés hídrico condicionará el rendimiento alcanzable en cada situación”

En otra parte de su presentación, el técnico explicó que el maíz es considerado un cultivo muy susceptible a restricciones hídricas, por lo que se lo suele restringir a los mejores ambientes o lotes-

“La adecuación de distintas prácticas de manejo al ambiente contemplará la fecha de siembra, la densidad de la siembra y el manejo nutricional. Además, será relevante también contemplar la tolerancia y la plasticidad del híbrido”, concluyó

En tanto el ingeniero Jorge Mercau del Grupo de Estudios Ambientales, de la Universidad de San Luis opinó que en la Argentina, el cultivo de maíz se base en ´la agricultura de secano, en la que la variabilidad en la oferta hídrica condiciona los rendimientos medios y el riesgo del cultivo.

En ese sentido explicó que en la Región Pampeana norte la mayor parte del maíz se siembra temprano entre septiembre y octubre, decisión que tuvo un condicionante histórico fuerte en la necesidad de escapar a una elevada presión de insectos plagas”(Noticias AgroPecuarias)