La semana del campo. Por Félix Sammartino | LA NACION
El martes, en una reunión excepcional por lo breve y expeditiva, y porque contó con la participación de Eduardo Buzzi, presidente de la Federación Agraria, que la esquivó durante casi un año, la Comisión de Enlace de las entidades del campo decidió realizar una apuesta imposible: le pidió al Gobierno generar un espacio de diálogo.
No anunciaron un nuevo paro del sector como muchos de los productores estaban esperando, en particular los que estuvieron la tarde del 3 del actual en la asamblea de Azul, sino que generaron un comunicado con buena onda: "El camino no es provocar más irritación. El camino es la paz social. Es necesario que el Gobierno entienda que somos parte de la solución y no del problema". Fue un nuevo pedido para dar vuelta la página del conflicto por la 125 y olvidarse de las revanchas.
Sin embargo, estas buenas intenciones no conformaron a nadie. Ni al Gobierno ni a los productores. Una muestra contundente del estado de crispación que se vive.
La respuesta del Gobierno llegó en menos de 24 horas con la recusación a la Cámara en lo Civil y Comercial Federal por la medida cautelar que frenó el decreto para estatizar el predio de Palermo a la Sociedad Rural Argentina.
La Federación Agraria también tuvo lo suyo: las cartas a gobernadores y a la presidenta Cristina Kirchner en las que se pedía "reubicación del personal afectado" al perder la emisión de los formularios 1116, de depósitos de granos, no tuvieron contestación alguna.
Por el lado de los productores también sonaron los cascotes. La alquimia de la Comisión de Enlace que transformó el anuncio de un nuevo paro del sector en un llamado a la "paz social" no convenció. Circularon mails con mensajes como "mientras el Gobierno declara la guerra todos los días, nosotros jugamos a poner la mejilla una y otra vez" o "nos estamos enfermando por encontrarle la vuelta a la manera de defender nuestros principios y valores más importantes y éstos nos salen con que nos tenemos que sentar a mirar sin hacer nada".
No hay dudas de que el combustible que motoriza la bronca de los productores es la erosión diaria de su renta, con el incremento de los costos y los menores ingresos proyectados. Y básicamente el convencimiento que están trabajando más para el Estado que para sí mismos por una de las cargas tributarias más altas de la historia.
Según un último análisis de la Sociedad Rural en el que contempla la actual situación de precios relativos, la presión fiscal y las distorsiones que pesan sobre el sector agrícola, el campo aporta un 58% más que el promedio de la economía y a nivel de producto individual contribuye con el 85% del total de sus resultados económicos.
Parece que llegó la hora de desencantar a los integrantes de la Comisión de Enlace, que quizás estaban esperando algún regalo tardío de los Reyes Magos, y contarles que hay actividades que sólo se pueden generar de a dos. El diálogo, es sin dudas una de ellas.Por lo visto nadie esta dispuesto a entablarlo.
¿Se puede llegar a pensar que el gobierno de Cristina Kirchner puede realizar este giro de su posición política mientras transita la fase más radicalizada del "vamos por todo"? El sentido común diría que parece muy poco probable.
Más allá de la ideología, el eje de los conflictos será la cuestión económica. Por eso la actitud más realista, observando como se presenta 2013, con déficit fiscales nacionales y provinciales, y por ser un año electoral en el que los gastos públicos nunca se los pone en caja, es entender que el Gobierno y el campo permanecerán parados cada uno en su vereda. Con la actitud de dos contendientes que saben de la fuerte e inevitable batalla que viene será por la plata. Porque todo indica que habrá nuevos embates al bolsillo de la producción.
Esta posición es por lo menos más sincera y representa menos tiempo perdido que el simulacro de diálogo que orquestó la semana pasada el gobernador Daniel Scioli. Como era previsible, la Comisión de Enlace provincial se fue con las manos vacías mientras que el ex motonauta se llevó la foto que buscaba.
En las asambleas que se realizarán durante enero y febrero se testeará el nivel de compromiso de los productores. Se conocerá el estado que luce uno de los contendientes de 2013.
RESUMEN
28
quintales / hectárea
Es el rinde promedio del trigo con el 92,2% de la superficie cosechada, según la Bolsa de Cereales.
LA FRASE
Horacio Salaverri / Presidente de carbap
"Con Scioli no hubo respuesta. Quedó todo en veremos"