Luego de dos semanas donde han prevalecido lluvias escasas, las reservas de humedad han encontrado un equilibrio favorable. Esto es válido para zonas con buen drenaje, no vinculadas a la problemática de inundaciones y anegamientos severos, algo muy extendido en la provincia de Buenos Aires.
Se han concretado las primeras lluvias de septiembre en áreas de la zona central del norte bonaerense, como así también en el sur santafesino, donde es posible que algunos lotes se hayan vuelto a saturar.
La distribución de agua de los pronósticos de esta semana, seguirá mejorando en forma progresiva a La Pampa y el sur de Córdoba, con nuevas lluvias para la provincia de Buenos Aires, pero con máximos que quedan al sur. Áreas del centro de la Mesopotamia y el centro este santafesino podrían verse afectadas por milimetrajes más importantes que los necesarios.
Una semana que se perfila con temperaturas y humedad en ascenso, proyectándose lluvias de mayor escala entre viernes y sábado.
El resto de la jornada de hoy, seguirá concentrando las coberturas nubosas con mayor potencial pluvial en el centro norte de la Mesopotamia. Dentro de este sector, los cielos nublados pueden alternar lluvias débiles y áreas reducidas donde pueden aparecer tormentas, esto se daría más bien en zonas del noreste de Entre Ríos, Corrientes y Misiones. No se prevén eventos fuertes, en general prevalecen eventos generados por saturación, más que por fuertes desarrollos verticales. La nubosidad toma gran parte del centro norte de Córdoba y Santa Fe. Sobre el sur de Santa Fe y la zona central del norte bonaerense, se dieron durante la madrugada chaparrones que sumaron hasta veinte milímetros.
Para mañana martes, la onda corta que afectó el litoral y la Mesopotamia, pierde presencia como mecanismo generador de lluvias pero aún puede provocar coberturas nubosas. Los vientos del este se vuelven intensos sobre la Mesopotamia y el centro del país, con mayor componente norte sobre las provincias del sur, lo cual provoca un aumento de la humedad en las capas bajas. No se esperan precipitaciones, pero en las primeras horas pueden darse neblinas y bancos de niebla, sobre todo en zonas que queden más frías durante la noche en la provincia de Buenos Aires.
Llegamos al miércoles con un patrón de circulación que se modifica poco. Esto necesariamente favorece la recirculación de aire húmedo y el predominio de coberturas nubosas en gran parte de las zonas productivas de las provincias del centro y la Mesopotamia, sin embargo son bajas las chances de que se observen precipitaciones. Son coberturas nubosas que no logran expansión vertical, pero en algunos sectores pueden saturarse y presentar algunas precipitaciones menores. No es una situación que impida trabajar en áreas donde los suelos permitan hacerlo. Por fuera de la región central y la Mesopotamia, pueden aparecer precipitaciones, incluso algunas nevadas en la cordillera patagónica, con lluvias débiles que avanzan sobre la estepa rionegrina y el sur de La Pampa.
Para el día jueves, el patrón atmosférico se vuelve más inestable en el centro de la Mesopotamia, y parte del litoral este. El norte entrerriano, el centro este y noreste de Santa Fe y el centro sur de Corrientes, definen una zona donde es posible que se presenten tormentas con chaparrones más copiosos. Este es un sector que a lo largo de la semana ira mostrando una alternancia importante entre los cielos nublados y los eventos pluviales. Es una situación que no remite a un pasaje frontal con cambio de masa de aire posterior, con lo cual, las mejoras son temporarias y prevalece un escenario de mucha inestabilidad. Durante esta jornada, en menor medida, las lluvias pueden alcanzar hasta el noreste de Córdoba y el sudeste de Santiago del Estero. También se presentara inestable la zona central del norte del país y el norte del NOA, con lluvias menos significativas. Otro sector que puede sumar lluvias, en este caso muy esperadas, es el este de Rio Negro.
Hacia el día viernes, comienza a ingresar desde el noreste de la Patagonia, un frente que comenzará a promover lluvias en las provincias de La Pampa y el sudoeste bonaerense. Esta onda ira encontrando a su paso una masa de aire con buena carga de humedad. En consecuencia, es muy improbable que a lo largo del resto del día, las precipitaciones no ganen cobertura sobre el resto del territorio bonaerense. En la transición hacia el sábado, los milimetrajes aumentan sobre la franja sur y también se siguen acumulando precipitaciones en La Pampa, sur de Córdoba y sur de Santa Fe, manteniéndose también sobre el resto de Buenos Aires. Los máximos pluviales del viernes para el sábado estarían sobre áreas del sur bonaerense.
Durante la primera parte del fin de semana, el sistema frontal tiende a moverse bastante rápido por la zona núcleo, no sin dejar precipitaciones, pero posiblemente sin dejar acumulados pluviales fuera de escala. Esto también se daría en zonas del litoral y el centro sur de la Mesopotamia, que habrá sumado en días previos. A lo largo de esta semana, se perfilan dos zonas con acumulados más importantes. La primera el jueves en zonas del litoral este y el centro de la Mesopotamia y la segunda del viernes para el sábado en el sur bonaerense. En el resto de las áreas productivas, las lluvias no son necesarias pero, no serían tan abundantes como las observadas hace quince días.