23/04/2012

Más nutrientes para el suelo: aumentó el uso de fertilizantes

Aún lejos del potencial, se superó el récord de 2007; crecen los fosfatados y los micronutrientes. Por Fernando Bertello | LA NACION

En 2011, el consumo de fertilizantes en el agro fue récord. Según datos de la Cámara de la Industria Argentina de Fertilizantes y Agroquímicos (Ciafa), el año pasado se utilizaron 3.721.745 toneladas.

Aunque apenas con unas pocas toneladas más, se superó la anterior marca más importante, que fue en 2007 con 3.715.000 toneladas.

Si bien el dato sobre el récord es trascendente, vale recordar que hace un par de años diversas proyecciones privadas sostenían que para 2011 la Argentina en realidad ya iba a estar en un consumo de 5 millones de toneladas. En 2004, la Fundación Producir Conservando tenía en mente precisamente esa estimación.

"Ese sería un nivel aceptable para beneficio del cultivo y el suelo, y así reponer la extracción que hace la agricultura intensiva de hace por lo menos 20 años", subrayó Eddy Fay, de OCP.

"De seguirse a este ritmo de no ecualización de extracción de nutrientes, prontamente veremos afectados los rindes de producción", advirtió Fay.

Los datos de Ciafa sobre 2011 dejan varios puntos relevantes para el análisis. Uno de ellos es que la participación de los fertilizantes fosfatados se equiparó prácticamente con los nitrogenados.

El año pasado se usaron 1.689.737 toneladas de fosfatados, contra 1.743.268 toneladas de nitrogenados.

"Entre 2008/2009 y 2011 se vio un crecimiento algo superior en fosfatados que en nitrogenados, lo que es razonable porque nuestras pampas tenían suficiente fosfato y lo fueron perdiendo, por lo que fertilizar con fosfato es algo que ha crecido y va a continuar así", señaló a La Nacion Carlos Capparelli, director ejecutivo de Ciafa.

Fay destacó que "el tema" a cuidar es la disminución de fósforo y también azufre, ya que de no aplicarse en forma apropiada se podrían resentir los rendimientos buscados.

Mercado total

Si se hace sintonía fina sobre los números de nitrogenados, el mercado contó con una oferta total de 2.409.134 toneladas. Esto se compuso por 150.450 toneladas de stock inicial; 1.262.000 de producción nacional y 996.684 toneladas importadas.

Descontando exportaciones, otros usos y un stock que quedó remanente, lo que consumió el agro fueron en concreto 1.743.268 toneladas.

En el caso de fosfatados, el mercado tuvo una oferta de 2.046.362 toneladas. De esa cifra, la importación representó 1.550.815 toneladas, en tanto que la producción nacional se ubicó en 345.000 toneladas. Descontados stocks finales, otros usos y exportaciones, el campo utilizó 1.689.737 toneladas.

Según los expertos, otro punto relevante que se viene observando es el crecimiento de los fertilizantes específicos en sus nutrientes y también en micronutrientes, donde hay resultados interesantes.

"Las respuestas más consistentes en micronutrientes son con zinc en maíz y boro en soja y girasol", indicó Jorge Bassi, vicepresidente de Fertilizar. Según Bassi, hay frecuencias de respuestas altas en el centro norte de la pampa húmeda.

En el caso del maíz, con zinc las respuestas rondan los 500 a 600 kilos por hectárea. Por el lado del boro, en soja el rinde adicional está en torno de los 200 kilos.

Vale recordar que un maíz de 12.000 kilos por hectárea tiene una necesidad de zinc de unos 560 gramos. Por su parte, en una soja de 3500 kilos por hectárea el requerimiento de boro es de 80 gramos.

Al margen de esos requerimientos, con fertilizantes de calidad, a campo en zinc se está trabajando con dosis de 800 gramos a un kilo por hectárea. En boro se están empleando de 100 a 200 gramos.

Para comparar, en Brasil los productores aplican entre 2 y 3 kilos de zinc y más de un kilo cuando se trata del boro.

Aplicaciones específicas

Otra enseñanza que dejó 2011 es que, según Fay, el productor está apuntando cada vez más a hacer aplicaciones sobre requerimientos específicos de cada lote.

"Hoy el productor busca aplicar fertilizantes según las deficiencias específicas que encuentra en cada lote, haciendo uso de mezclas que no solamente incorporan los nutrientes básicos como nitrógeno, fósforo y potasio, sino también azufre. De ahí el crecimiento del uso de mezclas con azufre", expresó.

Aunque la Argentina tendrá esta cosecha una producción menor de la esperada por la sequía [al comienzo de la campaña se pronosticaban 110 millones de toneladas y ahora se estiman entre 90 y 94 millones de toneladas], para los especialistas el país todavía no tocó su techo productivo. Tiene potencial para crecer más y eso significa también el consumo de más fertilizantes.

"La Argentina tiene que duplicar el uso de tecnología para aspirar a un techo de producción beneficioso para todos en un mundo ávido por consumir", concluyó Fay.

EXPECTATIVA POR EL MERCADO EN 2012

Según Jorge Bassi, vicepresidente de Fertilizar, la expectativa es que el consumo de fertilizantes en 2012 por lo menos muestre los mismos niveles de 2011. "Estamos esperando que se mantenga, pero va a depender de la superficie de trigo y cebada que finalmente se siembre", indicó Bassi. El mercado de fertilizantes está muy influido por lo que eventualmente pasa en la campaña de granos finos. Alrededor del 29% del mercado total se explica por cultivos como trigo, cebada y colza, entre otros. De acuerdo con Bassi, hasta el momento "hay una demanda de negocios" por fertilizantes "similar" a 2011.