09/01/2012

Las temidas fases secas que afectan al clima

Hasta 2050 habría lluvias escasas. LA NACIÓN


De acuerdo con el experto en agroclimatología Eduardo Sierra, la recurrente escasez de lluvias registrada en los últimos años no es un capricho del destino, sino el resultado de una fase de menores lluvias que se extenderá hasta 2025. Sin embargo, lo peor estaría por venir, ya que de 2025 a 2050 se experimentaría una fase totalmente seca.

"Los períodos van alternándose cada 25 años. Así, entre 1875 y 1900 tuvo lugar una fase húmeda, con inundaciones descriptas por Florentino Ameghino. De 1900 a 1925 se observó una fase de transición durante la cual las lluvias fueron disminuyendo. Y de 1926 a 1950 se registró una fase seca, que incluyó fuertes sequías acompañadas por voladuras de campos", explicó Sierra. Así, de acuerdo con esta teoría, de 1951 a 1975 llegó una nueva fase de transición de mayor humedad, y de 1975 a 2000 llegó nuevamente la fase húmeda, coincidente con el boom agrícola argentino. Y a partir de 2000 y hasta 2025, el clima está en una fase de transición de menos humedad.

"Paralelamente, parece estarse produciendo una acentuación del régimen térmico, observándose una marcada alternancia entre lapsos cálidos, con temperaturas máximas muy elevadas, que causan un fuerte consumo de humedad, y cortas pero muy vigorosas irrupciones de aire polar, que producen heladas muy tempranas y muy tardías", destacó el experto.

De acuerdo con Sierra, además el esquema de agricultura permanente con doble cultivo vuelve el sistema productivo más vulnerable a estos episodios de sequía y genera frentes de erosión muy grandes.

"El viejo esquema era más sustentable, ya que incluía una ganadería que trabajaba con reservas para muchos años. Por otro lado, la agricultura se incluía dentro de una rotación agrícola ganadera muy equilibrada, que incluía pasturas, maíz, trigo, girasol. Claro que en ese momento había un esquema impositivo que lo permitía, porque hoy no hay estímulo alguno para que los productores vuelvan a ese esquema", destacó Sierra.

Para los próximos meses, el experto augura mejores perspectivas para la producción en comparación con el desastre de 2008/2009.

"Habrá una alternancia entre lapsos lluviosos, en los que se dará el riesgo de tormentas localizadas severas, con vientos, y posibles episodios de granizo, los que serán seguidos por lapsos secos y calurosos, con riesgo de agotamiento de las reservas de humedad de los suelos. Por otro lado, la distribución de las precipitaciones será extremadamente despareja, mostrando focos con tormentas localizadas severas con granizo y vientos", finalizó el experto.