Barbale Agropecuaria propone siembras asociadas e integración con productores para el comercio exterior. AGROVOZ.


En el mercado internacional de las especialidades agrícolas (specialities), las legumbres de invierno empezaron a jugar un rol importante; entre ellas el garbanzo, que es una de la más buscadas en el mundo. Sus posibilidades comerciales son cada vez mayores, pero su difusión va a estar condicionada por las condiciones climáticas.

Sebastián de la Torre, socio gerente de la firma Barbale Agropecuaria SRL, con sede en Córdoba, enumeró algunas referencias a tomar en cuenta por los productores.


Rendimiento promedio. En las últimas campañas ha sido de 15-20 quintales por hectárea en producciones en secano, y de 25- 28 quintales en lotes bajo riego. Estos incrementos pueden llegar a ser mayores, dependiendo de cómo se encuentren los perfiles al momento de la elección del lote, las lluvias primaverales y cómo se presenten las heladas.

Requerimientos hídricos. En cuanto a precipitaciones, los años buenos para el garbanzo coinciden con primaveras poco lluviosas, ya que al cultivo no le favorece la acumulación de humedad, pero la mayor demanda está dada en su fase reproductiva. Más que eficiencia en el uso del agua hablaría de ciclos: el garbanzo, al ser indeterminado y en años de buenas condiciones sigue floreciendo, en años de pocas precipitaciones puede dar una revancha, ya que su ciclo sigue. En cambio, el trigo va estar condicionado en su período crítico.

Mercados de exportación. El volumen comercializado de garbanzo a nivel mundial oscila entre un millón y 1.200.000 toneladas al año; el potencial de Argentina va creciendo año tras año. Este último año se comercializaron unas 80 mil toneladas, aproximadamente; los buenos precios y últimas lluvias hacen que el área de siembra tenga un incremento con respecto a la campaña anterior de un 20 por ciento. Los principales países importadores y consumidores son India, Bangladesh, Pakistán y los de la Unión Europea.

Incorporación en el mix de cultivos invernales. No hay que olvidar que se trata de una especialidad; si bien el mercado es amplio, no es una commoditie. El garbanzo requiere que el productor tenga conocimiento tanto en la producción como en la comercialización. Si uno parte de estas premisas, lo puede incorporar en la rotación; lo ideal luego del garbanzo es sembrar maíz.

Rentabilidad estimada. Puede ser muy variable, porque no sólo está relacionada con el rendimiento, sino también con la calidad; hay que conocer el mercado y sus necesidades. En cuanto a valores, el escenario es alentador, pero el garbanzo se comercializa como grado 1, 2 y 3, de allí su diferencial de precio y sus distintos mercados.

Ambientes de producción. Los buenos rendimientos están relacionados con buenos ambientes; en años normales, en los que las heladas suelen ser frecuentes, en los lotes con bajos más pronunciados el impacto de la helada es mayor. Lo ideal es contar con lotes que no tengan complicaciones de malezas, más que todo las de hoja ancha, porque estarán hasta el fin del cultivo y pueden complicar en el secado. Hay que partir de una semilla sana, libre de enfermedades, secar bien los lotes, ver bien el tema de los caracoles, chinches, que pueden manchar los granos, regular bien la cosechadora, que no parta el grano, ya que la calidad es clave para su comercialización.

Estándares para exportación. El productor sabe que además del contexto internacional, el precio está relacionado directamente con la calidad; no sólo hay que obtener un buen producto en el campo, sino que también ese producto tiene que tener un buen proceso. Hoy se cuenta con plantas con la tecnología adecuada para cumplir con los estándares de calidad que requieren los mercados.

Negocio de integración. Como ventaja competitiva, se ofrece al productor un negocio de integración, ya sea en la parte productiva, compartiendo el riesgo en la producción a través de siembras asociadas. Y en lo que respecta a la comercialización se le propone participar en la exportación: el productor exporta su mercadería a través de la empresa, obteniendo siempre un beneficio mayor. Hoy bajo esta modalidad Barbale Agropecuaria está exportando a Chile, Brasil, Colombia y varios países de Europa.