31/03/2025

Cosecha en Córdoba. A pesar del clima, aumentaría en soja, maíz, sorgo y girasol

Con las características particulares en función de los desarrollos propios de cada cultivo, continúa desarrollándose la campaña granaria estival en la provincia de Córdoba: con el 38% de los lotes cosechados, el girasol supera las previsiones históricas de producción y, en paralelo, la recolección de maíz y sorgo avanza lentamente, mientras que la soja y el maní esperan su inicio. AGROVERDAD - 29/03/2025

A pesar de los factores climáticos determinantes de fines de diciembre a esta parte (seca en muchas zonas, olas de calor, luego el periodo de lluvias con grandes volúmenes y en el medio algunos eventos extremos de viento y granizo), al notable mencionado incremento del girasol, se suma el repunte en relación a la campaña anterior de soja, maíz y sorgo. En total, el volumen de cosecha esperable sería de 31.805.400 toneladas.

Este es el resumen del último informe del Departamento de Información Agronómica de la Bolsa de Cereales de Córdoba (BCCBA). De todas maneras, no está demás aclarar que es preciso aguardar hasta que concluya la cosecha para finalmente confirmar estas proyecciones, sobre todo por la sucesión de fenómenos climáticos con serias consecuencias, como el ocurrido este jueves en localidades del sur de Córdoba.

La carrera del girasol

Sin duda, el cultivo sobresaliente en la actual campaña es el girasol. Los porcentajes hablan por sí solos: con una superficie sembrada de 114.900 hectáreas (112 mil cosechables), se espera una producción de 289.300 toneladas. Esto implica, en relación al promedio histórico, un incremento del 227%.

Esto no solo es una muestra del cambio de estrategia a raíz del impacto de la chicharrita como vector y del Complejo de Achaparraminto en el maíz; es también un ejemplo de cómo se había prácticamente perdido el cultivo en la provincia de Córdoba.

El resto

El informe de la BCCBA agrega que “las estimaciones de producción de marzo revelan rendimientos superiores a los de febrero, con 31,1 qq/ha para soja, 79,4 qq/ha para maíz y 25,8 qq/ha para girasol. Particularmente, el girasol destaca con un avance de cosecha del 38% y una producción estimada que triplica el promedio histórico, evidenciando una notable adaptación al estrés térmico e hídrico, según referentes de la zona”.

Y agrega: “Asimismo, el sorgo muestra una disminución en rendimiento y producción respecto al mes previo, aunque sigue manteniendo un incremento interanual del 39%. En cuanto a la fenología, la soja tardía, parte de la temprana y el sorgo, se encuentran en su período crítico, una etapa crucial para la definición del rendimiento final”.

Lluvias salvadoras

El reporte hace referencia al impacto positivo de las últimas lluvias. “Si bien los estivales sufrieron leves pérdidas por estrés hídrico y térmico, las lluvias de marzo han contribuido a mejorar el estado general de los cultivos”.

Sanidad

“En soja se registró presencia moderada de arañuela (Tetranychus urticae), oruga de las leguminosas (Anticarsia gemmatalis), oruga medidora (Rachiplusia nu), oruga bolillera (Helicoverpa gelotopoeon) y el complejo de chinches (Nezara viridula, Piezodorus grossus y Dichelops baccarum)”, se detalla.

Además, se reportaron varias enfermedades como mancha marrón de la soja (Septoria glycines), Fusarium (Fusarium spp.), tizón del tallo (Phomopsis sojae), y mancha púrpura (Cercospora kikuchii) en media incidencia.

“En maní, se registraron ataques de arañuela (Tetranychus urticae) y viruela (Ramularia spp.). En maíz, se observó la presencia de oruga de la espiga (Helicoverpa zea), tizón (Exserohilum turcicum), y oruga cogollera (Spodoptera frugiperda). También se reportaron ataques de arañuela (Tetranychus urticae), mientras que en este último cultivo se observó la presencia frecuente de roya de la hoja (Puccinia sorghi) con baja incidencia”, añaden los técnicos de la BCCBA.

El trabajo cierra describiendo que “en girasol se informó la presencia de oruga medidora (Rachiplusia nu), palomas y cotorras. Por último, en sorgo se reportaron ataques moderados de pulgón amarillo (Schizaphis graminum) y bajos de cogollero (Spodoptera frugiperda)”.