26/12/2011

Aparición del tizón en los lotes de maíz

 Confesionario técnico. Por Héctor Chaves | Asesor. LA NACION

El cultivo de maíz en la Argentina convive con enfermedades de hoja y tallo que afectan su potencial de rendimiento. La ocurrencia de estas enfermedades varía con los años, y no adquieren igual severidad e importancia en todas las zonas. Para que estos patógenos se desarrollen y prosperen, debe estar el inóculo presente y combinarse con determinadas condiciones climáticas.

Todos los años en siembras tempranas de maíz, durante los estadios tempranos hasta floración del cultivo pueden observarse en las hojas algunas manchas de tizón, pero nunca logran avanzar demasiado, ya que requiere condiciones de alta humedad y temperaturas moderadas para su desarrollo. Pero si es común encontrarlo en siembras tardías. En estas últimas, y bajo condiciones adecuadas, la enfermedad puede ser muy agresiva, generando en las hojas grandes áreas necrosadas con forma de cigarro, reduciendo drásticamente el área fotosintética de la planta e implicando pérdidas importantes de rendimiento.

En las recorridas de lotes que realizo en las provincias de Entre Ríos y Santa Fe, año tras año voy observando el desempeño de los híbridos y el desarrollo de enfermedades. Este año, en forma atípica, en lotes de maíz temprano en el litoral pude encontrar varios casos de alta incidencia de tizón. Un rápido relevamiento nos permitió, como integrantes departamento técnico de Pioneer, identificar los casos más severos, su dispersión y cuantificar el grado de daño. Así pudimos hacer recomendaciones oportunas para proteger los lotes más afectados. De la zona del litoral evaluada, en un 36 por ciento de los campos se presentaron casos de alta presencia de la enfermedad, aunque solo un 10% de ellos con alta severidad, y los mismos se focalizaron en el norte de esta área.

Las condiciones ambientales del norte del litoral resultaron óptimas para el desarrollo de la enfermedad, no así en el resto de la región. Es posible que el tizón no haya avanzado, entre otras causas, por la amplia difusión de híbridos con buena tolerancia a esta enfermedad y porque en otros ambientes la situación climática no haya sido tan favorable para su desarrollo