01/12/2014

Transferencia de productores trigueros a molinos y exportadores será de $7.000 mill.

Lo advirtió un agrodiputado tomando como base una producción de 11,5 mill/tn y la diferencia entre el FAS teórico y lo que cobra el productor. NAP.

BUENOS AIRES (NAP). El diputado nacional Omar Barchetta (Partido Socialista) advirtió que los exportadores, “en complicidad con el Poder Ejecutivo, se adueñan de la renta del productor triguero”.

“Vamos a tener una cosecha 2014-2015 de 11,5 millones de toneladas aproximadamente. Por lo tanto, si tomamos la producción estimada y la multiplicamos por la diferencia de precios que se registra en este momento, surge que la transferencia de dinero de los productores a los molinos y exportadores será de $7.000 millones de pesos aproximadamente”, advirtió Barchetta, quien es dirigente de la Federación Agraria Argentina.

La especulación surge de analizar el precio de referencia (FAS teórico) o precio de equilibrio del “trigo pan” que diariamente publica el Ministerio de Agricultura, el cual en estos días es de $1.550 por tonelada, en tanto que la exportación y la molinería están pagando al productor alrededor de $850 y $1000 para trigo con calidad superior.

En noviembre del 2014 el diferencial entre el mercado doméstico -por debajo del valor teórico- y el valor que surge del FOB oficial (255 dólares por tonelada), asciende a los US$ 60 por tonelada.

"Si a esta situación le sumamos los derechos de exportación que tiene el trigo, el impuesto a las Ganancias y los demás tributos existentes tenemos una presión tributaria para el sector agropecuario que ronda el 80% del total”, dijo el agrodipuitado a la publicación Semanario Parlamentario.

Si la oferta argentina de trigo 2014-2015 fuera de 11,5 millones de toneladas, y tomando como referencia un consumo local de 6 millones de toneladas y stocks iniciales de 1,5 millones de toneladas, entonces el saldo exportable podría ubicarse en torno a 5,5 millones de toneladas.

El Poder Ejecutivo liberó en cuotas 1,5 millones de toneladas, cuando la exportación ya tenía comprada esa mercadería, por lo tanto no incentiva a la demanda a pagar precios razonables, menos aun cuando los precios empiezan a sentir la presión de la cosecha.

“Sería muy importante que el Gobierno nacional realice un arbitraje e intervenga en los mercados para proteger a los sectores productivos más vulnerables. Pero este intervencionismo, lo realiza sólo para proteger a las empresas multinacionales exportadoras y a la molinería, en perjuicio de los productores, porque en verdad lo único que interesa del trigo es que se produzca sólo para abastecer el mercado interno y que ninguna otra producción le quite superficie cultivable a la soja que genera un 35% de derechos de exportación, y esos recursos públicos son utilizados para hacer clientelismo político”, concluyó. (Noticias AgroPecuarias)