Salvador Di Stefano había anticipado que el llamado dólar “blue” llegaría a $ 400 al finalizar 2.022. Reconoció que su proyección para el año recién terminado pegó en el palo pero asegura que, ahora, su pronóstico se cumplirá y la cotización de la divisa paralela “la vemos entrando en los próximos días” a aquél valor, manteniéndose así en febrero, en marcha hacia nuevos escalones. AGROVERDAD

Los porteños suelen hablar del “dólar Moritán” (por Roberto García Moritán), el marido de la modelo “Pampita”, un empresario que se comprometió con la política y es legislador en CABA.

Nosotros preferimos a nuestro “Salva”, el analista económico más escuchado en el sector agropecuario.

-Salvador, ¿cómo seguirá el dólar blue?

-Di Stefano: En febrero la vemos andando en más de $ 400 y con posterioridad se desenvolverá a un ritmo igual o mayor a la tasa de inflación.

-Bueno …, pero así cómo has ido marcando su precio, ¿en cuánto habrá que pensar?

-Al “blue” lo vemos firme y sostenido. En marzo es altamente probable que andará “coqueteando” los 500 o cerca, para terminar el 2023, en diciembre, tal cual van las cosas, en $ 800. Hasta que entre el nuevo gobierno.

-¿Y el dólar oficial?

-Seguirá siendo devaluado conforme a la tasa de inflación mensual.

-O sea, el que tiene disponibilidades líquidas, ¿debiera apostar al dólar o recomendas otra cosa?

-Una persona que vive de los ingresos de su trabajo, puede pensar en que el dólar puede ser una opción, para proteger su dinero, sabiendo que no va a perder o si pierde, será muy poco. A un empresario le digo que mejor se ponga a pensar en qué activo comprar, porque la clave de las empresas será cómo atravesar el 2023 y enfrentar el 2024. No pueden echarse atrás ni bajar los brazos. No será ni fácil ni sencillo lo que vendrá, pero debe tratar de tener una visión para adelante de sus negocios.

Di Stefano estuvo ayer unas horas en Córdoba y Agroverdad tuvo la oportunidad de charlar un rato con él, aprovechando la ocasión para solicitarle una opinión acerca de la candente cuestión de la trepada que ha tenido el “blue”.