El Gobierno logró una reducción de las metas en el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI). El ministro de Economía, Sergio Massa, argumentó este pedido por el daño que ocasionó la sequía en los cultivos, principal fuente de dólares.

Sin embargo, en el campo esta medida fue una provocación. Para la Confederación de Rurales Argentina (CRA), es inadmisible que se reconozca la sequía ante el FMI, pero no ante los productores.

En este punto, la entidad señaló que hace falta un tipo de cambio único, menor presión impositiva, política crediticia y los derechos de exportación. “Estas medidas, no están en el lenguaje en que el Estado enfrenta a la sequía, pese a que utiliza esta situación para mejorar su perfil externo y suelta la mano a sus productores, que van penando en busca de no desaparecer como tales”, apuntó CRA.

Para la entidad, es paradójico que el Gobierno reconoce el efecto sequía en el exterior, pero a los productores los obliga resolver el gran problema de manera personal.

“El Gobierno Nacional responde con tibieza y anuncios que no se concretan y que tampoco se dirigen a la raíz medular del problema, mientras merma de actividad y hasta el propio abastecimiento del consumo interno”, cuestionó CRA en el marco de la sequía.

El campo analizó que la falta de agua generó caídas en las proyecciones de la cosecha, las pérdidas de stocks de hacienda, las dificultades de financiamiento de futura siembra, la merma de ingresos, la imposibilidad de pagar los alquileres, la caída de ingresos en las cadenas de cada materia prima y el impacto económico de pueblos y ciudades.

“La sequía, mucho antes que la sufra el Estado en su recaudación, impacta y aniquila al productor primario, utilizarla como argumento para el FMI e ignorarla al momento de tomar medidas para los productores es una nueva burla que muestra hasta qué punto intentan, ocultar hacia adentro, la verdad productiva de nuestro país y el drama de sus productores”, concluyó CRA en el comunicado.