12/12/2014

El agro cordobés y la sentencia de Alvarado

Según un estudio del Ieral y la Bolsa de Cereales, el sector agroalimentario pesa más que la industria automotriz y la construcción, pero dejó de crecer. LA VOZ
 Por Carlos Petroli

No habrá empresas exitosas en sociedades que fracasan, ni sectores prósperos en países que no progresan. El consultor Teo Zorraquín, formado en el movimiento Crea, volvió a reflotar esta semana en Córdoba la frase de Oscar Alvarado, el de­saparecido fundador de El Tejar, visto por sus colegas como un visionario en el diseño y la gestión de la empresa agropecuaria moderna.

La cita durante el almuerzo de fin de año de la Bolsa de Cereales procuró resumir el contexto y, a la vez, marcar la siguiente idea fuerza: ser empresario implica asumir riesgos, pero sólo es posible apuntalar la decisión y llevarla al éxito colectivo si media una estrategia conjunta, como país y como empresas.

En un ambiente de precios internacionales al que Zorraquín describió como “hostil” pero a la espera de un futuro rebote, observó que, en el eje económico, la inflación y el atraso cambiario llevan a que el manejo financiero figure en primer orden, por impactar más sobre la rentabilidad que en los períodos de estabilidad.

Estas definiciones se conectaron con las que tuvieron los economistas responsables de un estudio que elaboró la Bolsa de Cereales local, en conjunto con el Ieral de la Fundación Mediterránea, para medir la contribución del agro y sus industrias en la economía provincial.