21/09/2020

Dólar. El "botón rojo" del campo ya es 2021

Por ahora la situación del mercado de insumos no registra cambios, según los operadores. LA NACIÓN

Las mayores restricciones sobre el dólar en lo inmediato no alterarían la provisión de insumos para el campo en esta campaña, pero podrían generar dificultades para el ciclo de 2021 y, además, provocar complicaciones para el acceso a la divisa de empresas que tienen que pagar estos productos en el exterior.

Este es el balance general que, por estas horas, se está haciendo en el sector luego de que se conociera el mayor cepo sobre el dólar. Como el presidente Alberto Fernández hablando del "botón rojo" por la situación con el coronavirus, para el campo el "botón rojo" es cómo la situación económica pueda afectar su negocio.

"Esta última medida no cambia el estado de situación que se viene registrando, por lo que continúa la operatoria normal en fertilizantes, y en fitosanitarios se está tratando de regularizar deuda vieja", señaló a LA NACION una fuente de la industria que tiene conocimiento de muchas empresas de la actividad.

"En cuanto a las ventas de insumos, tanto fertilizantes como fitosanitarios, se siguen realizando, como siempre, al valor del dólar oficial", agregó ante una consulta sobre si habrá subas de precios en los insumos.

En una empresa ligada a la venta de fertilizantes apuntaron: "Todo sigue igual que la semana pasada". El ejecutivo consultado agregó: "Me parece que podemos seguir trabajando normalmente".
Algunos operadores señalaron que gran parte de los insumos de la campaña 2020 en marcha ya están en el país y que los eventuales problemas se sentirían más para el próximo ciclo, 2021/2022.
Horacio Busanello, consultor y exCEO de Los Grobo y expresidente de Syngenta Agro, señaló que no ve a las grandes empresas aumentando precios, "pero sí cuidando los stocks y retirando todos los descuentos y bonificaciones".

"Frente a la brecha cambiaria y a una potencial devaluación y/o problemas de importación, suena atractivo comprar insumos de importación (fertilizantes, fitosanitarios,etc) aprovechando ofertas con tarjetas o financiación en pesos", agregó.

Lo que Busanello prevé es que siga complicado el acceso a los dólares para pagar las importaciones "Hay restricciones para acceder para varias empresas. Ahora se agregan las restricciones para acceder a los dólares para pagar deudas financieras con el exterior, aunque no creo que haya muchas empresas del sector con esas deudas", afirmó.

El consultor detalló que las multinacionales se financian con la cuenta "intercompany", mientras las locales en el mercado nacional. "Creo que girar dólares para pagar importaciones se va a complicar cada vez más y esto pone nerviosos a los tesoreros de las multinacionales y a los proveedores de genéricos", explicó.
Según su análisis, las empresas argentinas no pueden calificar con las agencias de seguro de crédito internacional y eso es muy malo para la operatoria comercial porque, según expresó, limita el acceso a las líneas de crédito así como el plazo de las mismas.

En tanto, Busanello cree que la brecha cambiaria es un factor que le saca incentivos al productor para hacer más ventas.

"Provee argumentos para dilatar las decisiones de venta y profundizar el ahorro en granos. Hoy presenciamos una brecha de 90 pesos entre el dólar soja y el dólar blue", indicó. En el campo hay soja (18,4 millones de toneladas) y maíz (13,6 millones) pendiente de vender que representan un potencial ingreso de divisas por más de US$10.000 millones.

Para Eddy Fay, consultor, por las medidas del Banco Central "seguramente haya un parate de importaciones hasta seguir confirmando el tratamiento de esencial de parte de los fertilizantes" para las compras en el exterior. Apuntó que las aplicaciones de fertilizantes están "algo demoradas" por la falta de nuevas lluvias y que esto "dará tiempo" hasta que se acomoden las cosas para importar más.

En un comunicado, la Mesa de Enlace advirtió ayer "sobre los aumentos de precios de los principales insumos estratégicos, a causa de los mayores costos asociados con las medidas que impulsa a los importadores a reestructurar las deudas comerciales con sus proveedores, a partir de la restricción en el acceso al dólar oficial para que las empresas puedan pagar sus deudas comerciales".

Por: Fernando Bertello