El contrato marzo perdió US$7,90 y cerró con un ajuste de 443,04 dólares por tonelada; entre los fundamentos bajistas se destacan las lluvias en zonas agrícolas de Brasil y las buenas perspectivas para la producción en la Argentina. LA NACION - 17/01/2024
 

Sin un piso aparente, el valor de la soja cayó hoy un 1,8% en la Bolsa de Chicago, luego de que el ajuste de la posición marzo de la oleaginosa pasó de 450,94 a 443,04 dólares por tonelada, el registro más bajo desde los 442,21 dólares del 10 de noviembre de 2021.

Entre las razones que vienen abonando la corriente bajista que lleva casi dos meses –el quebranto suma un 14% desde los 515,33 dólares del 14 de noviembre último– se destacan el retorno de las lluvias a zonas de Brasil que necesitaban humedad en forma urgente; las favorables perspectivas para la producción en la Argentina, y la debilidad de las cotizaciones de la harina de soja.

Respecto de Brasil, el mercado recibió de mal modo proyecciones oficiales que la semana pasada ubicaron el volumen de la nueva cosecha por encima de las expectativas de los operadores, que hoy fluctúan de 143 a 150 millones de toneladas. Primero fue la Compañía Nacional de Abastecimiento (Conab), el miércoles anterior, que redujo su cálculo de 160,18 a 155,27 millones de toneladas, y, el viernes, fue el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA, por sus siglas en inglés), que ajustó su pronóstico de 161 a 157 millones.

En lo que va del año las lluvias mostraron cierta regularidad sobre las principales zonas productoras de Brasil y contribuirían a frenar el deterioro que evidenciaban las plantas en el centro y en el norte del país, donde debieron transitar buena parte de su desarrollo con déficit hídrico, y a potenciar los resultados de los cultivos sembrados en forma más tardía.

El quebranto del valor de la soja acumula un 14% desde el 14 de noviembre último, al pasar de 515,33 a 443,04 dólares por toneladaArchivo

Sin embargo, lo antedicho es motivo de controversia en Brasil, dado que no hay un punto de acuerdo en cuanto al potencial benéfico de lluvias que, para muchos, llegaron demasiado tarde. Ayer la Asociación Brasileña de Productores de Soja (Aprosoja) indicó a través de un comunicado que “la publicación de datos que no se ajustan a la realidad provocó una tendencia a la baja en los precios”, en clara alusión a los informes mensuales de la Conab y del USDA, y proyectó en 135 millones de toneladas el volumen de la producción 2023/2024 de soja brasileña.

Esos 20 millones de toneladas que separan la cifra de la Conab de la sostenida por Aprosoja son determinantes para el rumbo de los precios de la soja. Hoy el mercado opera en función de la cifra oficial.

Acerca de la Argentina, las buenas lluvias caídas entre el lunes y el martes apuntalaron las ya favorables perspectivas para la nueva cosecha de soja. Vale recordar que el miércoles pasado la Bolsa de Comerio de Rosario elevó de 50 a 52 millones de toneladas su previsión sobre el volumen de la producción local, tras los 20 millones ponderados para la campaña 2022/2023, diezmada por la sequía. El viernes el USDA incrementó la proyección argentina de 48 a 50 millones de toneladas, frente a los 25 millones que estimó en el ciclo precedente.

Para los operadores, este retorno pleno de la oferta argentina de soja –la recolección comenzará en marzo– es el que neutralizará la influencia alcista que podría tener la caída de la producción de Brasil –ya se recolectó el 1,7% del área apta–, siempre y cuando la logre mantener en torno de los 150 millones de toneladas. En cambio, de confirmarse un dato como el aportado por Aprosoja, el impacto sería alcista para los precios, independientemente de la oferta argentina.

El tercer fundamento bajista citado, la debilidad del valor de la harina, hoy tuvo un nuevo capítulo en Chicago, donde la posición marzo del subproducto de la soja cayó un 3,3%, al terminar la rueda con un precio de 395,39 dólares por tonelada. Esta “crisis” de la harina no responde solo al retorno al mercado de la Argentina, que es el principal exportador mundial, sino, también, al aumento de la molienda de soja en Estados Unidos, que mes tras mes está dejando remanentes de este producto sin una demanda interesada.

En Brasil, la Conab redujo el miércoles pasado de 160,18 a 155,27 millones de toneladas la estimación sobre la cosecha de soja

Bajas locales

En el mercado local los volúmenes comercializados de soja son mínimos, por la escasez de grano de la vieja cosecha y por desinterés de los vendedores a convalidar los valores actuales para el grano de la nueva campaña. En ese clima, hoy las propuestas de las fábricas por el grano disponible bajaron de 275.000 a 265.000 pesos por tonelada en las terminales de la zona del Gran Rosario.

En el Matba Rofex las posiciones abril y mayo de la soja perdieron US$5,50 y 5,10, en tanto que sus ajustes resultaron de 282 y de 284,40 dólares por tonelada. Un año atrás, en plena sequía, estos contratos se cotizaban a 411 y a 411,70 dólares por tonelada, respectivamente.

Acerca del mercado de exportación, el valor FOB de la soja en los puertos argentinos bajó hoy de 462 a 454 dólares por tonelada y el de la harina de soja, de 448 a 439 dólares, en tanto que el precio del aceite de soja subió de 831 a 850 dólares por tonelada, según informó la Secretaría de Agricultura de la Nación.

Por Dante Rofi