22/05/2015

En Sudamérica, el productor no vende

Indicadores agrícolas. En Brasil hay todavía 35 millones de toneladas en manos de los productores. En Argentina hay un volumen similar en iguales condiciones; es récord la venta de silo bolsa. LA VOZ

Por Pablo Adreani

En cosecha se esperaba un aluvión de ventas de soja, pero hasta el momento no se ha reflejado en el mercado.

Las ventas de silo bolsa están en un récord, la demanda es tan fuerte que las principales empresas han agotado sus stocks y están dando cupos para la entrega. Los productores han vendido hasta el momento, entre condiciones a precio y a fijar, un total acumulado a la exportación y a la industria aceitera, de 20,14 millones de toneladas de soja contra 14,9 millones de toneladas entregadas a igual fecha del año anterior.

La principal diferencia este año no son solamente las 3,8 millones de toneladas entregadas de más respecto al año anterior, sino la distinta composición de las ventas. En esta campaña los productores entregaron a fijar 11,6 millones de toneladas mientras que en la cosecha anterior entregaron 6,3 millones, un aumento de 5,3 millones de toneladas. En cambio las ventas a precio son muy similares, este año 2015 llegan a un total de 8,54 millones de toneladas contra 8,6 millones vendidas durante el 2014.

Esto nos indica que el productor ha tomado la soja como resguardo de valor ante posibles cambios en el mercado o en las variables económicas que definen su negocio. Muchos optan por no vender, pues consideran que a los actuales precios de mercado están tomando la perdida, pues en muchas zonas los márgenes resultan negativos. Sucede que en zonas como el NEA y NOA los rindes de indiferencia están muy por arriba a los rindes realmente cosechados, y esto implica tener que asumir márgenes negativos.

Otros productores están reteniendo la soja pues temen que se produzca una devaluación y en cierta forma están cubiertos si esta sucede. Y el grueso de los productores está pensando que el precio de la soja puede llegar a subir.

La posibilidad de una devaluación es bastante poco probable, de acuerdo con la política económica y de tipo de cambio implementado y anunciada por el Gobierno. Esto no quiere decir que no ocurra, pero las chances son realmente muy bajas. Con respecto a las posibilidades que el mercado suba, existen algunos indicadores que le ponen paños fríos a esta probabilidad. Empezando por la futura cosecha de soja 2015/16 en Estados Unidos que el Usda proyecta en la cifra histórica de 104,7 millones de toneladas. Esto lo refleja tibiamente Chicago con una baja de cinco dólares ante el ingreso de la nueva cosecha americana.

Donde tenemos una situación inédita es en Sudamérica, pues en estos momentos los productores de soja de Brasil tienen 35 millones de toneladas sin vender. A ello debemos agregar la mayor retención de los productores de Argentina que, de acuerdo a nuestros análisis, podría llegar al final de la cosecha (fines de junio) con un volumen sin vender de otros 35 millones de toneladas. Resulta entonces que entre Brasil y Argentina, habrá sin vender un volumen de 70 millones de toneladas, que deberían ser volcados al mercado durante el segundo semestre de 2015.

Este volumen se adiciona a la producción de soja estadounidense que ingresa al mercado en octubre. Todo indica que el mercado podrá ingresar en una nueva onda bajista a partir del ingreso de la nueva cosecha americana.

Si este fuera el caso, no tendría sentido entonces retener la soja a la espera de una suba de los precios o una eventual devaluación.

Existen mecanismos que pueden permitir a los productores estar cubiertos ante una eventual devaluación, en el caso que decidan vender la soja disponible, y es la compra de dólar futuro en el Rofex.

Desde el punto de vista de la tendencia bajista de los precios de la soja en Chicago, sólo un evento climático de magnitud que impacte negativamente en la producción de soja americana podrá hacer revertir esta tendencia. Ello provocaría un cambio de tendencia del mercado, que iría en búsqueda de la suba.

*Analista de mercado