La Bolsa de Cereales de Buenos Aires recortó a 36 millones de toneladas su pronóstico de producción para la presente campaña. AGROVOZ

Redacción Agrovoz

Las malas noticias que trajo el temporal de lluvias que afectó la cosecha de sojadesde inicios de abril terminaron de confirmarse este jueves.
La Bolsa de Cereales de Buenos Aires estimó que, entre la mayor superficie perdida por este escenario de exceso de humedad y las pérdidas por apertura de vainas y brotado de granos, la producción 2017/18 se reduce otras dos millones de toneladas, hasta 36 millones en total.
El último pronóstico de la entidad porteña había sido de 38 millones de toneladas, mientras que la producción 2016/17 fue de 57,5 millones de toneladas.
Es decir, que de un año a otro la cosecha de soja perdería 21,5 millones de toneladas: es la caída más abrupta de la que se tenga memoria y la peor campaña desde el ciclo 2008/09, también signado por una sequía. 
Panorama
“Luego del temporal, los productores vuelven al campo y comenzamos a relevar mermas de rinde en lotes de soja cuyas productividades ya se encontraban fuertemente reducidas tras la sequía estival. En paralelo, también se suman importantes problemas en la calidad del grano a cosecha”, resumió la Bolsa de Buenos Aires.
El cálculo es que las lluvias de los últimos 45 días elevaron en 300 mil hectáreas la superficie perdida completamente, lo que significa 1,2 millones de hectáreas en total que no se pudieron recolectar. 
A esto hay que sumar que el exceso de humedad ajustó aún más los rindes esperados, desde los 22,2 quintales por hectáreas que se perfilaban como promedio nacional hasta la semana pasada, hasta los 21,5 quintales que se prevén ahora, según la entidad porteña.