03/07/2012

El sector agroindustrial argentino dejó de ser competitivo

Ni siquiera una fuerte depreciación del tipo de cambio nominal sería suficiente para revertir la tendencia actual | ON24AGRO

Primera noticia. El sector agroindustrial argentino, es decir, la columna vertebral de la economía local, dejó de ser competitivo. Segunda noticia. Eso sucede a pesar de que los precios de la soja –columna vertebral del sector agroindustrial argentino– se encuentran en un nivel récord.

En la actualidad se necesitaría que la tonelada de soja en EE.UU. cotizara 650 u$s/tonelada de aquí a fin de año para que en diciembre 2012 se restituyera el nivel de competitividad efectivo que tenía el agro argentino en agosto 2008 con una soja a 530 u$s/tonelada.

Tal conclusión proviene del último semanario económico difundido por Economía & Regiones, en el cual se publica la evolución del Indice de Competitividad Precio Efectivo del Sector Agropecuario Exportador elaborado por esa consultora (que estima la competitividad del sector a partir de los precios de los commodities agrícolas, el tipo de cambio, los impuestos directos e indirectos, las retenciones a las exportaciones y los costos de producción).

El Indice de Competitividad de E&R, teniendo en cuenta un tipo de cambio oficial de 4,75 $/u$s en diciembre 2012 y un valor promedio de la soja de 515 u$s/tonelada para este año, sería a fines de 2012 de 0,96 versus 1,0 en diciembre de 2001.

“El deterioro de la competitividad precio efectiva del sector agro exportador es resultado de que la inflación de costos de producción supera holgadamente la depreciación del tipo de cambio”, indica el informe de E&R.

El dato: en agosto de 2008 el precio de la soja en EE.UU. era similar al actual, pero la competitividad precio efectiva del sector agroexportador argentino se ubicaba en torno a 1.15 (es decir: 20 puntos porcentuales por encima del valor actual). Por otra parte, a mediados de 2007, 2009 y 2010 los niveles de competitividad fueron similares al actual, pero con un precio de la soja sustancialmente inferior al actual.

“Teniendo en cuenta que muy difícilmente el precio de la soja suba a los niveles (+700 u$s/tonelada) que el modelo (kirchnerista) necesita, lo más probable sería esperar que la competitividad precio del sector agroexportador continuara deteriorándose como resultado de la inflación de costos en el mediano y largo plazo”, explica el informe de E&R.

“De hecho, con el actual contexto inflacionario y de aumento de costos de producción, ni siquiera una fuerte depreciación del tipo de cambio nominal sería una herramienta útil hoy para brindar competitividad al sector. Eso porque una devaluación sería pan para hoy y hambre para mañana en términos de competitividad”, añade.