10/04/2017

Chicago: continúa la tónica negativa para los granos

El contrato futuro de soja siguió perdiendo terreno ante la gran cosecha sudamericana y por el momento no hay pronósticos alcistas. Para el maíz, en el ámbito internacional, puede haber subas. AMBITO

En una semana con pocas novedades, los mercados fueron fluctuando con pocas variaciones, dentro de una tónica negativa. La gran duda es el impacto que tendrán las lluvias que vienen dándose en nuestro país y, si a futuro el clima se volverá más seco como se espera, para permitir el avance de la cosecha.

En el frente internacional, la expectativa es ver cómo el USDA introduce en sus proyecciones de oferta y demanda los comentarios de buena producción sudamericana y mayores stocks en EE.UU. Los analistas dispararon sus proyecciones la semana pasada y resultaron bajistas. Pero veremos qué dice el USDA el martes próximo.

Recordemos que el mercado viene descontando en precios una gran cosecha de soja sudamericana.

Como si eso fuera poco el USDA en su reporte de intención de siembra proyectó un aumento de área para la oleaginosa de 2,4 millones de hectáreas, superando las expectativas de los analistas.

Además durante los últimos días se sumó algo de premio climático al mercado de soja porque tras las fuertes lluvias del domingo y lunes pasado, y las de este fin de semana, ya había quienes temían un problema productivo como ocurrió el año pasado a esta misma fecha. Sin embargo, como se esperan luego varios días secos, el premio climático se retiró.

En lo que hace al maíz el mercado no está tan presionado a la baja porque en primer lugar los especuladores no estaban con una posición significativa cuando llegó la cosecha sudamericana. Sin embargo la producción sería muy buena, ya que Brasil recuperaría con creces las 20 millones de toneladas que no tuvo el año pasado y la Argentina pasaría de 30 a 37 millones de toneladas.

El elemento positivo en este mercado es que el área de siembra en EE.UU. bajaría y de venir cualquier problema climático la oferta podría menguar. Sin embargo, las subas en Chicago no necesariamente deberían trasladarse al mercado local.

En lo que hace al trigo el grano juega un papel más local, pero los precios parecen clavados con un techo para julio de 170 u$s/t. Posiblemente esto se deba a que los exportadores han logrado comprar muy bien. Luego de que estos se retiren serán los molinos los únicos que quedarán comprando. Así es que se generaría un mercado un poco más débil y disparidad de condiciones en cuanto a calidad, precios y pagos.

Párrafo aparte merece destacar que ya se está negociando trigo para cosecha nueva en torno de 160 u$s/t y maíz apuntando a 150 u$s/t. Ambos precios no son descabellados para el escenario que imaginamos, con mercados abastecidos, y nuestro país repitiendo la producción récord de maíz, y sumando todavía más trigo. Esto podría hacer la tarea de colocar el trigo que exceda las necesidades de compra de Brasil y las internas de la Argentina una tarea más desafiante, presionando los precios a la baja.

(*) Del Centro de Agronegocios y Alimentos de la Universidad Austral.