Tarifas bajas también pueden generar inflación. IERAL
Marcelo Capello - mcapello@ieral.org
Pocos meses atrás desde el Ministerio de Economía se justificaba el creciente gasto en subsidios económicos con el argumento de que se trata de subvenciones indirectas a los ingresos de la población, que ayudan a mantener elevado el nivel de consumo privado. En realidad, dicho enunciado olvida considerar algunas consecuencias indirectas del gasto en subsidios, como es su impacto sobre la tasa de inflación, que carcome los ingresos reales y el poder adquisitivo de la población. Así, lo que el Estado pone en un bolsillo de las personas, lo saca del otro, con efectos extras que no resultan neutros para la economía.