El Decreto 1.386/01 tiene como finalidad auxiliar financieramente a los contribuyentes de gravámenes nacionales que hubieran sufrido pérdidas económicas de importante significación, ya sea en su producción, capacidad de producción o ingresos. Si en los hechos el contribuyente muestra a través de las ventas una evolución positiva en su desempeño y en la expansión alcanzada en sus explotaciones, lo que implica que no se vería imposibilitada de atender normalmente a sus obligaciones de naturaleza tributaria. Por lo tanto correspondería dictar el decaimiento de los beneficios.