25/03/2025

Rindes y capacidad de uso del suelo. Qué muestran los datos de las últimas campañas en Córdoba

Un estudio sostenido de las estimaciones agrícolas durante las últimas campañas agrícolas en Córdoba permitió establecer el rendimiento en función de unidades espaciales definidas por su capacidad de uso del suelo. AGROVERDAD - 24/03/2025

Con este objetivo, se implementó una metodología para generar información detallada sobre la producción agrícola de las últimas cuatro campañas, cuyos resultados se plasman en los Mapas de Estimaciones agrícolas de soja y maíz 2020/21, 2021/22, 2022/23 y 2023/24.

De esta manera, el trabajo realizado por el Ministerio de Bioagroindustria de la Provincia y el INTA Regional Córdoba, con el apoyo técnico de IDECOR, posibilitará a productores e instituciones contar con datos precisos para la toma de decisiones.

Rindes y capacidad de uso del suelo

Los resultados del Mapeo digital mostraron una clara relación entre la capacidad de uso del suelo y los rendimientos promedio de maíz y soja.

En general, los suelos de mejor capacidad de uso (Clase I y II) presentan los rendimientos más altos para ambos cultivos, con promedios de 91 qq/ha y 81 qq/ha en maíz, y 35 qq/ha y 32 qq/ha en soja, respectivamente.

A medida que la capacidad de uso disminuye (Clases III a VI), los rendimientos también tienden a reducirse. En el caso del maíz, los suelos de Clase III a VI presentan valores de entre 64 y 69 qq/ha, mientras que para la soja los rendimientos oscilan entre 26 y 27 qq/ha.

La Clase V es especial, ya que agrupa suelos planos con riesgo a inundación y/o presencia de piedras, pero no sigue el gradiente negativo de las otras clases. En la provincia de Córdoba son pocos los suelos que pertenecen a esta clase por ende los casos de cultivo son menos.

Una medida importante en este análisis es el coeficiente de variación (CV), que mide la variabilidad de los rendimientos dentro de cada clase de suelo. Un CV bajo indica mayor estabilidad, mientras que un CV alto sugiere alta variabilidad en los rendimientos

En el caso del maíz, el CV oscila entre 24% y 28%, mientras que para la soja varía entre 29% y 32%, lo que indica una mayor variabilidad en este último cultivo.

“En general, se observa una relativa estabilidad en los rendimientos en función de la capacidad de uso del suelo”, señaló el estudio.

A su vez, los mapas generados muestran cómo los rendimientos de soja y maíz varían espacialmente en la provincia, según la capacidad de uso del suelo.

Los suelos con mayor capacidad de uso muestran una distribución de rendimientos más alta y estable, mientras que los suelos con limitaciones presentan rendimientos más bajos y con mayor variabilidad.

En síntesis, los datos reflejan que los suelos con mejor capacidad de uso no solo presentan mayores rendimientos promedio, sino que también tienden a ser más estables a lo largo de las campañas. En contraste, en suelos de menor calidad, la variabilidad en los rendimientos es mayor, lo que sugiere un impacto más fuerte de factores ambientales y de manejo.

Tendencia en los rindes

El mapeo también permitió examinar la evolución de los rendimientos a lo largo de las últimas cuatro campañas agrícolas en función de la capacidad de uso del suelo, en base a lo cual se pudieron identificar tendencias en la productividad de maíz y soja según cada categoría de suelo.

Este análisis permitió demostrar la influencia de las condiciones edáficas en la respuesta del cultivo, ante distintos factores ambientales.

“A través de la comparación temporal, se pueden detectar patrones de estabilidad o variabilidad en los rendimientos, así como posibles impactos de eventos climáticos o sanitarios en determinadas zonas”, explicaron.

En este sentido, los datos generados mostraron una caída generalizada de los rendimientos en la campaña 2022/23, seguida de una recuperación en la campaña 2023/24.

Además, “se evidencia que los suelos de mejor capacidad de uso (Clases I y II) no solo presentan mayores rendimientos en promedio, sino que muestran una mejor recuperación en la temporada 2023/24”, puntualizaron.

“Estos resultados refuerzan la importancia de la calidad del suelo en la resiliencia productiva de los cultivos y proporcionan información clave para la toma de decisiones en la planificación agrícola”, concluyeron.

Metodología

La capacidad de uso del suelo indica la aptitud del suelo para la producción agrícola en función de factores como textura, drenaje, pendiente y riesgo de erosión. Agrupa los suelos en distintas categorías, desde aquellos sin limitaciones significativas hasta los que presentan restricciones severas, más adecuados para otros usos.

Empelando un modelo de predicción de rendimiento para cultivos de soja y maíz a nivel semi-predial, en una grilla de 500 x 500 metros (equivalente a 25 hectáreas), los técnicos pudieron analizar la producción con un mayor nivel de detalle.

Específicamente, la metodología emplea modelos de aprendizaje computacional basados en árboles de decisión, como Random Forest y otros enfoques afines.

“Estos métodos permiten analizar también variables agroclimáticas, índices de vegetación y datos de manejo, que ayudan a mejorar las estimaciones”, señalaron.

De esta manera, en una primera instancia, el estudio realizó un análisis general de las cuatro campañas agrícolas y los rendimientos de maíz y soja según la capacidad de uso del suelo. Para cada categoría, se calcularon la media y el coeficiente de variación del rendimiento, lo que permitió evaluar tanto el nivel de productividad como la estabilidad de los rendimientos en cada tipo de suelo.

Acceso a los datos

Los interesados en conocer más sobre estos datos y la metodología desarrollada, pueden contactarse con el equipo de la Secretaría de Agricultura de la Provincia de Córdoba al teléfono 434-21443/48 int 6262 o al correo electrónico agriculturacba@gmail.com.

También, para conocer más sobre las Cartas de suelo, también podrán consultar al equipo de Cartografía de Suelos y Evaluación de Tierras, del Grupo Manejo de Cultivos y RR.NN., Área de Agronomía de INTA Manfredi, Geól. Mauro Lanfranco e-mail: maurolanfranco14@gmail.com e Ing. Agr. Lautaro Faule e-mail: faule.lautaro@inta.gob.ar.

*Fuente: IDECOR