Según Arriola, “el maíz tardío nos obliga a salir de la anualización a la hora de pensar el sistema de producción”, otra excusa para dejar de medir resultados en términos de cultivo o campaña y pensar en el sistema. Si lo anterior no alcanzara para mostrar esto, ejemplificó: en suelos texturales (como los de Pergamino) hacer un CS en lugar de tener un maíz que no hace más que secarse en el lote evita el lavado de nitrógeno por lluvias en un equivalente a 160 kilogramos de urea.
LA NACION