El avance de la cosecha de soja impulsó un repunte contundente en los negocios en el mercado argentino, alcanzando las 1,2 millones de toneladas comercializadas en la última semana de abril, según el reporte del Mercado de Granos de la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR). Esta cifra representa el volumen semanal más alto de la campaña y marca un punto de inflexión en la dinámica comercial del complejo sojero.
El dato sobresale en un contexto donde la comercialización total de la campaña 2024/25 alcanza las 13 Mt, con 6,1 Mt ya fijadas con precio. Aunque se iguala el ritmo del año pasado, el avance sigue por debajo del promedio de los últimos cinco años. Sin embargo, la aceleración de los contratos es significativa: desde marzo, se duplicaron los acuerdos y se triplicó la soja con precio en firme. Un 9 % de la cosecha cerró precio en este breve lapso, el mayor porcentaje en un periodo tan corto desde 2019.
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Se espera una campaña histórica de trigo, pero tener un aliado será clave: cómo planificar y acceder a financiamientoEste frenesí comercial coincidió con una mayor presión logística. La cosecha ya cubre el 45% del área estimada, y los ingresos de camiones a los puertos del Gran Rosario superaron los 5.300 por día en abril. En total, se descargaron 4,8 Mt de soja desde el inicio de las labores, el mayor volumen desde 2022. La creciente demanda de espacios en puerto derivó en descuentos sobre los granos entregados, afectando las cotizaciones del mercado disponible.
La conjunción de una oferta concentrada y la congestión logística arrastró los precios Pizarra en Rosario hasta los US$ 250/t, un 11% menos desde la implementación del nuevo esquema cambiario. No obstante, hacia principios de mayo, los valores repuntaron y superaron los USD 270/t, reflejando una cierta estabilización tras el shock inicial.
En el plano internacional, una posible distensión en la prolongada guerra arancelaria entre Estados Unidos y China genera expectativas en los mercados agrícolas. Este fin de semana, el secretario del Tesoro estadounidense se reunirá con el viceprimer ministro chino en Ginebra, con el objetivo de sentar las bases para una eventual reducción de aranceles. Las señales oficiales sugieren un viraje hacia un comercio más abierto, con EE. UU. dialogando también con al menos 17 socios comerciales, incluida Gran Bretaña.
Los operadores financieros ya reaccionaron: los fondos especulativos pasaron de estar netamente vendidos a tener posiciones compradas en soja y aceite. En abril, los contratos netos comprados por aceite de soja superaron los 108.000, impulsando el precio hasta los 1.100 USD/t, un 14% más que en marzo. En contraposición, la harina de soja sigue bajo presión, con niveles récord de contratos vendidos y precios promedio de USD 326/t, apenas por debajo de los registros de marzo.
En paralelo, Brasil alcanzó un récord de molienda de trigo, lo que incrementó la demanda del cereal. Sin embargo, Argentina está cediendo participación frente a competidores como Rusia y Uruguay. Las condiciones logísticas, los precios relativos y la calidad están redefiniendo el mapa de proveedores del mayor importador sudamericano de trigo.
El mercado de granos sigue envuelto en una alta volatilidad, con factores locales e internacionales que impactan en los precios y decisiones comerciales. La atención ahora se centra en la evolución del conflicto comercial global, la continuidad del ritmo de cosecha y el comportamiento de los fondos especulativos, que podrían seguir moviendo la aguja en los próximos meses.