Medidas económicas, condicionadas por el 27-F. IERAL
Jorge Vasconcelos
jvasconcelos@ieral.org
El congelamiento de precios por 60 días disparó mil conjeturas. Bajo la idea que este anuncio es insuficiente y riesgoso y, teniendo en cuenta todo lo que se juega el gobierno en las legislativas de octubre, hay espacio para especular acerca de lo que seguirá y/o complementará a lo ya anunciado. Para colmo, el congelamiento vence hacia Semana Santa, con una seguidilla de feriados en la que "todo puede suceder". Son las autoridades las que tienen que desmentir los falsos rumores. Mientras tanto, lo que puede hacerse es marcar los "daños colaterales" que producirían algunas de las supuestas medidas en danza, así como las complicaciones a enfrentar en caso que no exista tal plan B. Al mismo tiempo, todo está condicionado a la suerte que corra la Argentina en los tribunales de Nueva York en el litigio con los "fondos buitre". Si después de la audiencia del 27 de febrero se vislumbra un fallo benigno para el país, algunas decisiones locales con sesgo pro-mercado podrían esperarse. Un desenlace negativo, en cambio, podría disparar más y no menos abroquelamiento en la dimensión financiera.