La Argentina no es Venezuela (ni tampoco Australia). IERAL
Jorge Vasconcelos
jvasconcelos@ieral.org
Durante varios años consecutivos, la Argentina disfrutó de mejoras sostenidas de sus términos de intercambio. El "bonus" llegó a representar 4,5 puntos del PIB por año, permitiendo que la economía aumentara al mismo tiempo la inversión y el consumo. Sin embargo, el pico de esa tendencia parece haberse dado en 2011. El 2012 cerró con una merma del orden de 3 % en el índice de los términos de intercambio y para este 2013 y años subsiguientes habría que trabajar con la hipótesis de cierta estabilidad en esta variable. En otras palabras, sería arriesgado extrapolar subas adicionales a las ya registradas entre 2003 y 2011, que acumularon nada menos que un 30 %. Asumir esta nueva realidad tiene profundas implicancias para la estrategia de crecimiento de nuestro país. La Argentina se aleja de Venezuela, ya que las exportaciones de soja llegan a 700 dólares por habitante, contra más de 3000 dólares por habitante que representa el petróleo venezolano. Pero también de Australia, que puede seguir apostando exclusivamente a los recursos naturales porque tiene sólo 20 millones de habitantes.