30/01/2017

Sin acuerdo en la UE para aprobar tres maíces transgénicos

La oposición no alcanzó la mayoría calificada necesaria para retirar las solicitudes de manera definitiva. AGROVOZ

Bruselas. Los Estados miembros de la Unión Europea (UE) no lograron este viernes un acuerdo sobre la autorización del cultivo de tres variedades de maíz transgénico, dos nuevas (Bt11 y 1507) y una ya autorizada (MON810) cuyo permiso ya ha expirado, en un voto que se saldó sin mayoría suficiente.
Para las nuevas variedades, la votación resultó con 13 estados en contra, ocho a favor (entre ellos España) y seis abstenciones, mientras que la renovación del MON810 contó con 12 votos en contra, 10 a favor y seis abstenciones.
Sin embargo, la oposición no alcanzó la mayoría calificada necesaria para retirar las solicitudes de manera definitiva, por lo que el proceso de autorización puede seguir adelante.
"La Comisión reflexionará ahora sobre los siguientes pasos a seguir", afirmó a la agencia EFE un portavoz comunitario.

En contra

El Ejecutivo comunitario precisó que muchos de los países que votaron en contra están acogidos a la cláusula del "opt-out", que implica que, de aprobarse a nivel comunitario, estas variedades transgénicas no se cultivarían en los países miembros.
Las organizaciones ecologistas celebraron que la propuesta de la CE no haya obtenido el respaldo necesario de los países.
"La mayoría de los países han rechazado las propuestas de la Comisión, a pesar de que pueden vetar su cultivo a nivel nacional", dijo la directora de política alimentaria en Greenpeace, Franziska Achterberg, tras conocer el resultado del voto.
Según Achterberg, "la Comisión estaría ciega si interpretara esto como una luz verde".
Desde la organización Amigos de la Tierra cuestionaron que el proceso siga adelante, pese al "rechazo masivo" en la votación, así como la posición de España.
"La mayoría de los gobiernos de la UE apuestan por una agricultura sin transgénicos. Es hora de que nuestro gobierno se ponga del lado del sector agrario, del medio ambiente y de la ciudadanía en vez de seguirle el juego a las multinacionales de la biotecnología agraria", dijo la responsable de Agricultura y Alimentación, Blanca Ruibal.