Federación Agraria advirtió que en la provincia de Buenos Aires se perdieron 11.000 agricultores. AMBITO FINANCIERO

Los reclamos de los productores trigueros volvieron fuertemente a la agenda con la asunción del nuevo ministro de Agricultura, Norberto Yauhar. Por caso, la Federación Agraria (FAA) advirtió que en la provincia de Buenos Aires dejaron la actividad 11.000 productores, mientras reclamó al Gobierno nacional y al provincial «soluciones inmediatas» para el sector.

Los representantes bonaerenses de FAA realizaron una asamblea triguera en Bahía Blanca, tal como expresó el documento final que «en 90 días se define el futuro de la próxima campaña de trigo».

«Pedimos que se defina con claridad cuál va a ser la política en materia triguera», se expresó en el escrito de conclusión de la reunión organizada por el Consejo Delegado Regional del Distrito 11 de la entidad, que está presidido por el director titular de FAA, Roberto Molini.

En el encuentro estuvo el vicepresidente 2º de FAA, Guillermo Giannasi, que manifestó: «Hay una enorme preocupación».

«Llevamos seis años padeciendo falta de transparencia y distorsión en el precio que llega al productor. Por las políticas oficiales les transferimos a los grandes grupos exportadores alrededor de 60 dólares por tonelada», aclaró el dirigente.

Además señaló que «mientras baja el precio que percibimos por el trigo, el pan, que valía 2 pesos en 2006, hoy se vende a 8 o 10 pesos. Y nuestros costos de producción aumentaron considerablemente». «Necesitamos con urgencia que se resuelva este problema. Hemos pedido audiencia desde la FAA al ministro Yauhar, y también esperamos que preste atención el gobernador (Daniel) Scioli, ya que en la provincia de Buenos Aires han desaparecido 11.000 productores».

En tanto, los agricultores de la Federación Entrerriana de Cooperativas Coop. Ltda. (FEDECO), la Sociedad Rural Argentina (SRA) y de la Federación de Asociaciones Rurales de Entre Ríos (FARER) también expusieron su preocupación por la falta de solución al problema del trigo.

Concluida la cosecha, con casi un millón de toneladas logradas por los productores entrerrianos, «no sólo persisten los problemas de comercialización de años anteriores, sino que además por la baja del precio internacional y la transferencia de recursos a los exportadores el valor que se pueda obtener será de quebranto, ya que no alcanza a cubrir los costos de producción», señalaron las entidades en un comunicado de prensa.

Los productores indican que «como un claro ejemplo del derrumbe de los precios, en la presente campaña, cuando el productor pueda vender su cosecha no logrará superar los $ 400 por tonelada, porque el Banco de la Nación Argentina otorgó créditos a tasa cero a principios de año, fijando un 70% del valor FAS teórico, lo que representaba $ 560 por tonelada». Por eso pidieron al gobernador de la provincia de Entre Ríos, Sergio Urribarri, que gestione ante el ministro de Agricultura de la Nación y el secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno, audiencias para buscar una solución a este problema para que «así el productor agropecuario deje de sufrir los descuentos que le generan una retención adicional a sus productos».