13/07/2012

Precios de granos ponen en alerta a los sectores avícola y porcino

Los productos de granja con márgenes de ganancia exiguo. EL CRONISTA

Después de sufrir durante la primera mitad del año con la conjunción de stocks altos y precios en baja, los frigoríficos de aves y porcinos enfrentarán un segundo semestre más turbulento.
Con la disparada de las cotizaciones de maíz y soja en las últimas semanas, las empresas del sector trabajan con márgenes negativos en las operaciones de porcinos y en cortes simples de carne de pollo.
“Estamos desesperados. Los márgenes de ganancia están muy achatados para la agroindustria y el productor”, afirmó a Valor el presidente de la cooperativa de Santa Catarina Coopercentral Aurora, Mario Lanznaster, uno de los productores de pollos y porcinos más grandes de Brasil.
Responsable por cerca de 70% de los costos de producción de aves y porcinos, el forraje saltó más de 30% en los últimos dos meses, a R$ 0,80 el kilo en Santa Catarina, según Lanznaster. La situación se agravó en las últimas semanas, con la aceleración de la suba de la harina de soja y la reversión de la tendencia a la baja del maíz. Juntos, ambos productos son responsables por 85% del forraje.
En el caso de la harina de soja, el contexto que era dramático por la fuerte reducción de la cosecha brasileña de la oleaginosa, tomó contornos más negativos con el deterioro de las condiciones climáticas en Estasdos Unidos, lo que derribó la productividad del grano en el país.
Según Lanznaster, el precio de la harina prácticamente se duplicó en los últimos cuarenta días, pasando de R$ 0,60 a R$ 1,10 por kilo. “A pesar de la reducción de la cosecha nacional, el país continuó exportando”.
Ni siquiera el maíz, que impidió una suba más alta de los costos de producción en el primer semestre, podría ayudar. En el acumulado anual, el indicador Esalq / BM&FBovespa para el maíz registra una caída de 14,4%, influenciado por la cosecha record del grano en Brasil. “Con la sequía en EEUU, la bolsa volvió a R$ 28”, dijo el presidente de Coopercentral Aurora. Para enfrentar la situación, una de las alternativas sería transferir la suba de los costos de producción al consumidor, tarea particularmente difícil en un contexto de retracción de las cotizaciones de su principal competidora, la carne bovina. “Las carnes de pollo y porcina siempre se ajustan al precio de la carne bovina, que sin duda es la preferida del consumidor”, afirmó Ariovaldo Zani, vicepresidente ejecutivo del Sindicato Nacional de la Industria de Alimentación Animal (Sindiracoes).
Con la dificultad para repasar los precios, los frigoríficos de aves y porcinos difícilmente conseguirán una buena rentabilidad. En caso de la carne de pollo, solo los cortes más caros, traen alguna rentabilidad. “Pero apenas de 1% a 2%”, dijo Lanznaster. En los cortes más simples, el sector trabaja sin márgenes de ganancia, mientras las ventas de pollo entero acumulan un retorno negativo de hasta 10%.
Para el productor de porcinos la situación es bastante delicada. El costo de producción aumentó mucho (R$ 1,15 por kilo) en comparación al valor recibido de R$ 1,50, en promedio, por kilo del animal.
La Asociación Brasileña de Criadores de Porcinos (ABCS) calcula que el perjuicio del sector suma R$ 4.000 millones en el país, de los cuales R$ 1.000 millones en Santa Catarina, donde más de 70 municipios de la región oeste -que responden por 25% de la producción nacional-decretaron situación de emergencia económica a comienzos de la semana