IERAL de la Fundación Mediterraena elaboró un informe estimando el impacto de una campaña en la que se espera un nuevo récord productivo. AGROFY NEWS
Considerando 7 cultivos líderes, hoy la expectativa está puesta en una producción de 132 millones de toneladas para el ciclo 18/19.
La expectativa actualmente está puesta en la cosecha de una producción de 132 millones de toneladas para el actual ciclo, lo que representa una recuperación del 32,2% respecto a la campaña previa, que se vio afectada por una sequía histórica.
En este sentido, desde IERAL de la Fundación Mediterránea calcularon el valor de la producción agrícola de la campaña 2018/19: "Se ubicaría en US$ 33.962 millones, creciendo en US$ 6.260 millones, el equivalente a un crecimiento del 22% respecto del ciclo 17/18".
Con respecto a las exportaciones, la generación de divisas asociada al ciclo se ubica por debajo del valor de la producción debido a que sólo un porcentaje de los granos producidos, muy elevado por cierto en algunos casos pero no tanto en otros, se termina exportando en forma directa o indirecta (harinas, aceites, biocombustibles).
A su vez, el año comercial de los granos (y de sus derivados) no es el mismo que el año calendario, particularmente en los cultivos estivales. Por caso, el ciclo comercial de la soja 18/19 es abril 2019 – Marzo 2020, esto significa que la soja producida este año será exportada seguramente en gran proporción en el 2019 pero quedarán saldos que pasarán al 2020, más si la campaña es buena.
En base a todas las consideraciones anteriores, desde IERAL estiman exportaciones por US$ 28.170 millones de graneles agrícolas y de sus principales derivados industriales para el año 2019, creciendo en US$ 5.020 millones respecto a los envíos de 2018.
Esto indica que, en promedio, estas proyecciones arrojan un promedio de US$ 128 millones por día, más allá de la estacionalidad que puede haber en el ingreso de divisas.
MENORES PRECIOS
IERAL destacó también que raras veces ocurre que una muy buena cosecha viene acompañada de mayores precios internacionales: "En general, ocurre lo contrario; ya sea porque el país tiene un peso importante en los mercados de commodities, que por una cuestión de estacionalidad es mayor a la que se puede deducir de los indicadores habituales)".
Además los importadores no se “apuran” por comprar, porque los exportadores deben colocar mercadería en mercados más distantes y/o precios menos atractivos, porque en Argentina es caro mantener existencias durante muchos meses (particularmente cuando se es arrendatario y se deben cancelar deudas), o por los motivos que fuesen, habitualmente sucede que buenas cosechas enfrentan precios en baja y viceversa.
Esta campaña no es la excepción: "Como referencia, la soja se comercializó a un valor promedio de US$381 la tonelada en 2018, mientras que en función de lo observado en los primeros meses de este año y también en lo que muestran los mercados de futuros, el valor 2019, de no mediar eventos extraordinarios se estaría aproximando a los US$330, un ajuste interanual del 13%".
En la harina de soja se observa un patrón similar, un precio de US$ 369 en 2018 y una media de US$ 325 en 2019 (caída del 12%). También en maíz, con valores de US$ 173 y US$ 161 respectivamente (-7%).
De esta forma, en materia de precios internacionales, la situación luce menos favorable que en los volúmenes, al menos en la comparación contra 2018.