17/10/2017

No todas son buenas en el agro: granos perdieron hasta 22,6% de su poder de compra

En comparación con el promedio 2004-2015, la pérdida de poder adquisitivo llega a casi 35 por ciento. AGROVOZ

Redacción Agrovoz

El poder de compra de los granos en Argentina se redujo entre 7,1 y 22,6 por ciento en la última campaña con respecto a la anterior, según un artículo publicado en el informe de coyuntura semanal del Instituto de Estudios de la Realidad Argentina y Latinoamericana (Ieral) de Fundación Mediterránea.
En tanto, en comparación con el promedio 2004-2015, el deterioro del poder adquisitivo fue de entre 21,9 y 34,8 por ciento, calculan los investigadores Juan Manuel Garzón y Nicolás Torre, autores del trabajo. 
Los economistas explican que “la desmejora provino de una combinación de factores que le son adversos a todo sector exportador de commodities: una baja en los precios internacionales y un menor poder de compra del dólar en el mercado interno”.


Así, una tonelada de trigo, en pesos, compra hoy 7,1 por ciento menos bienes que hace un año y 30,9 por ciento menos que en la última década; la caída para maíz es de 22,6 por ciento y 21,9 por ciento; respectivamente; y, para soja, de 14,4 por ciento y 34,8 por ciento. 
Precios y dólar
Como se mencionó, la caída de los precios internacionales de cereales y oleaginosas, y la devaluación que no alcanzó a cubrir el avance de la inflación, configuran el combo de factores que explican esta tendencia negativa en el poder adquisitivo de los granos.
Precios. De acuerdo a la Subsecretaría de Mercados Agropecuarios del Ministerio de Agroindustria, el valor FOB de las exportaciones de los tres cultivos se redujo entre tres y nueve por ciento, producto fundamentalmente de las súper cosechas que elevaron la oferta, mientras que la demanda creció a menor ritmo.
Dólar. En nueve meses subió su cotización 9%, cuando la inflación minorista estuvo en casi 18 por ciento. “Si se consideran los últimos 12 meses, la variación del dólar (punta a punta) sube al 14 por ciento y, la del nivel general de precios, al 25 por ciento”, estima el informe. 
De allí, la conclusión de Garzón y Torres es que “el dólar viene perdiendo valor de intercambio respecto de una canasta básica de bienes y servicios, resignando buena parte de lo ganado en la devaluación de fines de 2015”.