La propuesta de agregar valor a la producción en el lugar de origen, como estrategia para el desarrollo territorial, sigue definiendo la agenda agropecuaria y agroindustrial del país. Mientras muchos productores argentinos ya están embarcados en distintos emprendimientos que persiguen ese desafío, también los jefes comunales cobraron plena conciencia de su rol protagónico para impulsarlo. Así lo consideró Mario Bragachini, técnico del INTA Manfredi, quien además destacó el rol de la Subsecretaría de Agregado de Valor del Ministerio de Agricultura de la Nación, a cargo de Oscar Solís.
“La estrategia es concientizar a los intendentes de la importancia del valor agregado en origen, desde el punto de vista social y económico para el desarrollo”, sostuvo el especialista, para quien “eso tiene que incluir a todo la sociedad, con un plan estratégico y una mesa de gestión local permanente, en la que tienen que estar los educadores, los organismos de ciencia y técnica, la industria, el comercio y por supuesto las organizaciones de productores, para que el crecimiento y el desarrollo se den junto con el ordenamiento territorial”.
En esa línea, destacó el “sinergismo total” que puede lograrse con un salto de competitividad que favorezca los procesos de industrialización de productos agropecuarios y, en consecuencia, consolide un mayor posicionamiento en mercados internacionales. “Toda la exportación argentina del sector agropecuario y agroindustrial tiene un grado calculado de 22,8 por ciento de industrialización. Para 2020 se pretende elevar esa cifra al 40 por ciento”, explicó el técnico y añadió: “El impacto que puede llegar a tener ese mayor grado de industrialización, más el aumento de producción de 100 a 157 millones de toneladas de granos, llevaría a un saldo exportable de 40.000 a 100.000 millones de dólares”.
Bragachini disertó ayer en la XI Feria y Congreso Internacional para Gobiernos Locales, que se realiza hasta mañana en el Centro de exposiciones de Costa Salguero, en la ciudad de Buenos Aires. Este congreso cuenta con más de 9.000 funcionarios municipales, provinciales y nacionales de 30 países y tienen lugar actividades de actualización técnica en gestión de servicios municipales, capacitaciones en gestión de gobierno, presentaciones de experiencias y foros de debate.
“El INTA tiene la posibilidad de favorecer la generación de nuevos mercados en el exterior, puede salir a defender la calidad, la inocuidad y la denominación de origen de distintos productos argentinos”, dijo el coordinador. Como ejemplo, se refirió a la posibilidad de “llevar el know-how institucional en distintas cadenas –trigo, soja, maíz, carne bovina, leche– el modelo que se utilizó en maquinaria agrícola, donde el conocimiento del INTA en siembra directa, silobolsa, agricultura de precisión, eficiencia productiva, respaldó la venta de la maquinaria agrícola en 32 países”.