17/10/2014

La soja, y una mirada políticamente incorrecta

 La Asociación de la Cadena de la Soja Argentina (Acsoja), próxima a celebrar sus 10 años, salió a refrescar los valores del sistema productivo para el país. LA VOZ

Hablar mal de la soja o de los “sojeros” ha venido resultando políticamente correcto para muchos observadores distraídos o poco informados. Un discurso del que también buscan sacar partido intereses de diferente naturaleza.

Los libros se chamuscan y los argumentos pierden consistencia cuando flaquean los ingresos fiscales, como ahora, o cuando se concluye que la mentada “sojización” del país tiene raíces en los incentivos públicos. Para lo bueno y para lo malo, la soja ha estado en el centro de las opiniones. Y en los días que corren, los productores están en la mira ante la pérdida de divisas de la última cosecha.

La Asociación de la Cadena de la Soja Argentina (Acsoja), próxima a celebrar 10 años de su constitución, salió a refrescar algunos datos, extraviados en medio de los cuestionamientos.

Además de ocupar la mayor parte de la superficie agrícola y generar el 25 por ciento de las divisas por exportaciones –datos conocidos–, se añaden otros: esta proteína vegetal está presente en unos 1.018 productos que los argentinos adquieren en el supermercado. No sólo sirve para “alimentar a los chanchos chinos”, como señalan los detractores.

En el país, se ha posicionado como una de las cadenas más competitivas en términos tecnológicos, productivos y de generación de divisas. La Argentina es uno de los orígenes que más valor agrega al poroto de soja (Estados Unidos, el mayor productor mundial lo exporta como grano tal cual en un 60 por ciento).

En los últimos cuatro años, la capacidad instalada de la industria del crushing (molienda) llegó en el país a superar a la producción primaria, ubicándose arriba de los 50 millones de toneladas anuales.

En los años recientes, se agregó la industria de biodiésel que, en las mezclas con gasoil, está ayudando a reconfigurar la matriz energética (además de sumar a la canasta de exportaciones).

De un relevamiento realizado por Acsoja en supermercados argentinos, surge que hay 1.018 productos que contienen soja o algún derivado. El ingrediente más frecuente es la lecitina de soja (si se suman leche en polvo, crema de leche en polvo y cacao, que contienen lecitina).

Además, se encuentra proteína vegetal en medallones de carne y embutidos, bizcochuelos y budines, caldos y mezclas para preparar bizcochuelos. Hay aceite vegetal en snacks , panes y tostadas, mayonesas y conservas de pescados y mariscos. También se encuentra el grano en jugos y en salsa de soja. Y los usos avanzan en la industria oleoquímica. En Estados Unidos, Ford presentó junto a Lear Corporation un nuevo apoyacabezas compuesto en un 25 por ciento de espuma de soja, material que es hasta un 24 por ciento más renovable que la espuma basada en petróleo. De este modo, se reduce la emisión de gases de efecto invernadero. Con estas cartas, la cadena muestra sus efectos positivos.