23/10/2013

La Argentina va a OMC por trabas de UE a biodiésel

La Argentina es el mayor exportador mundial de biodiésel y junto con Indonesia representa el 90% de las importaciones de la Unión Europea. AMBITO FINANCIERO

Los miembros de la Unión Europea (UE) acordaron ayer imponer aranceles a las importaciones de biodiésel de la Argentina e Indonesia, países a los que acusa de vender el combustible al bloque a precios injustamente bajos.

La mayoría de los miembros de la UE respaldaron la posición de la Comisión Europea de que los dos países incurrieron en dumping, o ventas por debajo de los costos o de un precio justo de mercado, una acusación negada por la Argentina e Indonesia.

La Cancillería argentina anunció ayer que iniciará acciones ante la Organización Mundial del Comercio (OMC). "La magnitud del perjuicio que ocasionará la medida a una industria que se desarrolló recientemente de manera dinámica e innovadora, sumada a su naturaleza claramente proteccionista, no deja otra opción para la República Argentina que el accionar inmediato bajo el Entendimiento de Solución de Diferencias (ESD) de la OMC", sostuvo la Cancillería.

En un comunicado, señaló que la presentación se efectuará "tan pronto como ésta sea puesta en vigor, de modo de asegurar la producción, las ventas externas y el empleo generado en nuestro país por dicho sector".

Ayer, la Comisión Europea propuso aranceles de 217 euros y 246 euros (u$s 300 y u$s 340) por tonelada de biodiésel importado desde la Argentina, y entre 122 y 179 euros por tonelada importada desde Indonesia.

Las importaciones ya están sujetas a aranceles provisionales, impuestos en mayo. Las tasas definitivas, que son más altas, se aplicarán desde fines de noviembre.

La decisión representó un duro golpe para las empresas exportadoras de la Argentina, que argumentan que la medida sólo busca proteger a la industria europea, a la que consideran ineficiente.

"Finalmente queda firme esta medida injusta que surge de un incorrecto cálculo. Lo único que esto genera es un perjuicio a la Argentina y al consumidor europeo, que va a pagar un combustible más caro", señaló el presidente de la Cámara Argentina de Biocombustibles (Carbio), Luis Zubizarreta.

De acuerdo con Zubizarreta, la Unión Europea tomó para sus cálculos de costos para la elaboración del biodiésel los precios internacionales del aceite de soja -el insumo usado en la Argentina para el combustible-, que son muy superiores a los valores domésticos del país.

La Argentina es el mayor exportador mundial de biodiésel y junto con Indonesia representa un 90% de las importaciones de biodiésel de la Unión Europea. Su participación en el mercado de la UE creció a un 22% en 2011 desde un 9% en 2009. Carbio dijo que las pérdidas para la Argentina superarán los u$s 1.000 millones este año.

En 2011, el último año en que los embarques se realizaron normalmente, las exportaciones a la UE alcanzaron los u$s 1.750 millones, frente a los escasos 500 millones previstos para este año, que podrían caer a cero con los nuevos aranceles en plena vigencia.

La cámara confía en tener éxito en su planteo ante la OMC, aunque destacó que, debido a lo prolongados que suelen ser los procesos en ese organismo, no espera recuperar el mercado europeo hasta 2016. "Mientras tanto, la industria de exportación (argentina) va a estar parada", agregó Zubizarreta.

A diferencia del biodiésel elaborado con aceite de soja de la Argentina, en Europa el combustible es principalmente un derivado del aceite de colza, mientras que en Asia es fabricado mayormente con aceite de palma.

Las empresas que se verán afectadas por la decisión de la UE incluyen a las gigantes con negocios en la Argentina Bunge y Louis Dreyfus Commodities, que enfrentarán tasas de 217 y 239 euros por tonelada, respectivamente.