01/09/2015

Juan Llach: ¿Explota todo?


¿Explota todo? Esta fue una pregunta que se hizo el economista y sociólogo Juan José Llach en el Seminario Nacional que anualmente realiza la Asociación de Cooperativas Argentinas. Esta vez, tuvo lugar en Córdoba. La respuesta que a sí mismo se dió y al medio millar de asistentes a la reunión fue: “Creo que la situación es muy difícil pero que la expectativa de cambio va a prevalecer”, vaticinó. Eso, cualquiera sea finalmente el candidato a Presidente que triunfe.

Reflexionó en el sentido de que “si se analiza el resultado de las PASO, fue un triunfo de la moderación”. “Macri y Massa son moderados: Scioli tiene que demostrarlo”, agregó.

Interpretó que ese estado de opinión de la sociedad va a “llegar a acuerdos moderados”, pues el “el voto marca esa tendencia”. “No habrá un giro de 180 grados, quizás de 90 o 45 grados, de acuerdo a lo que haga el próximo presidente”, sentenció, considerando que “lo más probable es que haya un balotaje” y que en el próximo turno se tendrá “un Congreso fraccionado”, que planteará “la necesidad de acordar”.

Menor política anti-agropecuaria
Respecto al campo, pronosticó que la política agropecuaria del próximo gobierno va a tener “un menor sesgo anti-agropecuario, por convicción o necesidad”.

Comparó los probables escenarios, a los que identificó con “A” y “B”, según sea el candidato a Presidente que gane las elecciones (se entendió que comparaba a Mauricio Macri y a Daniel Scioli):

-En el escenario A, estimó: pronta eliminación de ROEs y reducción de retenciones a las economías regionales y a rubros agrícolas, pero menos a la soja.

-En el escenario B, calculó que será una economía más cerrada, con “menor sesgo anti-agropecuario” pero con objetivos “más limitados y mejoras más lentas” y tal vez “discrecionales”, por manejos políticos parecidos a los del actual gobierno (simpatías o adhesiones de los gobiernos provinciales).

-Desestimó, pero lo mencionó, a un tercer escenario: una Argentina conflictiva parecida a la de la década de 1980. “No lo avizoró”, confió.

Llach prefirió, finalmente, decir que vislumbra un “panorama no negativo” (parafraseando a César Cobos en su famoso voto por la Resolución 125), que, de todos modos, se desenvolverá “en circunstancias que son difíciles”.

¿Aterrizaje suave?
Aún cuando reflejó un cierto grado de optimismo respecto a que con el tiempo se superarán algunos de los problemas económicos más acuciantes, manifestó que “espero que sea un aterrizaje suave”.

Analizó que “en la Argentina hemos sufrido sobredosis de giros de 180 grados, incluso hechos por las mismas personas”.

Reconoció que el país ha experimentado un fuerte retroceso, al cual graficó diciendo que ostenta “la tercera tasa de inflación entre 189 países, sólo superada por Venezuela y Sudán”. “Se ha usado al tipo de cambio como ancla; hoy un dólar compra menos, un 7% menos que en diciembre de 2001”.

Otra oportunidad perdida
Juzgó que en los últimos 10 años se ha atravesado “otra oportunidad perdida, mal aprovechada”.

Argentina ha perdido posiciones aún en el plano agropecuario. Sin que haga falta mencionar al trigo, en soja se ha crecido menos que otros países. En carnes se cayó al 12do. lugar, pasados por Uruguay y Paraguay. En leche la producción es de 10.500 millones de litros, igual la de 1999. Contra aumentos de Uruguay 70%, Brasil 66, Nueza Zelanda del 54 y Chile del 33%.

“Argentina ha perdido participación de manera muy impresionante”, reparó.

Estimó que “las oportunidades para Argentina van a seguir pero será más difícil”, con “precios más flojos, muy dependiente del clima y la tecnología”. Habrá un nuevo sesgo: hacia la demanda directa de productos. “En soja no hay un proyecto”, opinó.

De todos modos, no dejó el mensaje de un panorama completamente negro: “Esto va a cambiar sea quién sea (el Presidente). Necesitamos dólares. La forma más rápida de obtenerlos es vía e sector agropecuario”, fue su resumen.

La demanda de alimentos
Juan José Llach analizó que en Alimentos la demanda mundial se comportará “más lenta pero seguirá firme, en los próximos10 años, con momentos de volatilidad”.

Mostró el facsimil de un artículo periodístico reciente en el cual el CEO de Nestlé afirma: “La demanda de alimentos seguirá aumentando”.

Previó que va a haber cambios cualitativos en los alimentos y aquellos que los adviertan van a crecer más rápido. Va a tener más protagonismo “la demanda directa de proteínas. Esto no nos encuentra muy bien parados a los argentinos”, sentenció. Hizo notar que “somos un competidor debilitado”.

Un aliado será el crecimiento de la población mundial. India superará a China. La demanda mundial de alimentos seguirá creciendo al ritmo que lo hagan esos países.

Las franjas no pobres o de clase media serán más de 5.000 millones. “¿Si este no es el mercado el mercado cuál es?”, se preguntó. Pero “Argentina no tiene una estrategia para esto”, insistió.

Señaló que el comercio global de la soja va a seguir siendo de un volumen importante, con una tendencia a comprar más granos que subproductos, porque todos intentarán hacer el crashing.

En materia de precios pronosticó que la soja no va a caer a 150 dólares y se desenvolverá más quizás en torno a 350.

Final del ciclo K
En resumen, las previsiones de Llach para la economía de los próximos meses, fueron:
-El año va terminar con una caída del Producto Bruto Interno de un 1% .
-La Inflación concluiría en un 28,5%.
-El dólar oficial finalizará en $ 9,80.
-Las Exportaciones llegarán a por 62.000 millones de dólares y las importaciones a 60.000. Incluso pueden sumar 62.000 con lo cual el balance comercial será “cero o negativo”.
-Se tendrá un balance de pagos deficitario.
-Las Reservas del BCRA serán de 26.000 / 29.000 dólares mientras que los activos netos serán de 12.300 millones de dólares.

El próximo gobierno
Como objetivos que debiera plantearse el próximo gobierno, mediante “acuerdos”, citó los siguientes:
-Creación de un 1.000.000 de puestos de trabajo.
-Inversión del 23% del Producto Bruto Interno.
-Un Plan Estratégico de Producción, que no sólo se base en el tipo de cambio.
-Pero sobre el Tipo de Cambio, deberá ser único y de mercado. Normalidad en el manejo diario del Tipo de Cambio.
-Estimular las oportunidades de los principales sectores productivos.
-Aumentar significativamente las exportaciones, de modo que crezcan un 50% respecto a los niveles actuales en 2019.
-Reducción del gasto público al 2% del Producto Bruto Interno.