25/06/2025

El pronóstico de un economista experto en agro sobre lo que puede pasar con las retenciones: las tres razones por las que se podría mantener la baja transitoria

David Miazzo anticipó que el dólar podría moverse en los meses previos a las elecciones, que el gobierno tiene incentivos fiscales y cambiarios para mantener las retenciones más bajas, y que queda mucha cosecha por liquidar. AGROFY NEWS - 24/06/2025


24deJuniode2025a las15:30

En medio de un contexto internacional volátil y con la mirada puesta en el 30 de junio —fecha clave para la definición de las retenciones—David Miazzo, economista y fundador de Data Miazzo, brindó en  Agrofy News Live un completo análisis sobre los factores que hoy condicionan el mercado agroexportador argentino: los efectos de la coyuntura bélica en los precios internacionales, la política cambiaria del gobierno y los incentivos fiscales para sostener la baja de retenciones.

¿Qué puede pasar con las retenciones?

“El gobierno tiene razones para sostener esta baja, tanto fiscales como cambiarias”, sostuvo Miazzo. Explicó que la baja transitoria en los derechos de exportación le costó hasta ahora al Estado unos 700 millones de dólares —“el 0,1 % del PBI”— pero que, aun así, “el gobierno acumuló un superávit financiero del 0,3 % en el primer semestre”. En ese marco, sostuvo que “desde lo fiscal, se puede permitir” continuar con la reducción, más aún cuando persiste la necesidad de acelerar el ingreso de dólares en la segunda mitad del año, donde la estacionalidad juega en contra.

Además, advirtió que queda “mucha cosecha por liquidar”: cerca del 60 % de la soja y la mitad de la superficie de maíz tardío todavía no se comercializaron, lo que podría ofrecer margen de maniobra para el gobierno si decide extender los incentivos. “El campo tiene mucho para vender todavía, y eso sería clave en un segundo semestre, que además es electoral”, señaló.

Respecto al escenario cambiario, Miazzo fue claro: “El tipo de cambio está en niveles históricamente bajos, tanto en términos reales como en comparación a las grandes devaluaciones pasadas”, afirmó. Si bien reconoció que el gobierno apuesta a que el crecimiento de Vaca Muerta y la minería generen una oferta estructural de divisas que sostenga el esquema actual, advirtió: “Las importaciones ya están presionando, el turismo también, y el dólar mostró resistencia a la baja incluso en plena época de liquidaciones récord”. De cara a los próximos meses, anticipó: “Probablemente veamos un dólar más movido en agosto, septiembre y octubre, en un contexto donde siempre las elecciones suman incertidumbre”.

Por último, se refirió al impacto del conflicto bélico internacional en los mercados. Según explicó, “el trigo fue el más impactado por la volatilidad”, mientras que soja y maíz se mantuvieron más estables, aunque correlacionados en parte con el petróleo por su uso en biocombustibles. “Si efectivamente la escalada se frena, como sugiere Trump, deberíamos ver una normalización en las próximas 24 horas”, agregó.

Con múltiples factores en juego —cosecha, tipo de cambio, clima electoral y política fiscal—, el 30 de junio aparece como una bisagra en el calendario agroexportador. Y el sector productivo sigue con atención cada señal que llega desde el gobierno.