15/02/2019

El Gobierno anunció baja en impuestos patronales, pero esquivó los créditos

Las medidas son para pymes de las economías regionales. BAE

Con gusto a poco sonó la medida que anunció el presidente Mauricio Macri ayer pasadas las 10:00 en la Casa Rosada. El aumento del mínimo no imponible sobre cada trabajador de las economías regionales era uno de los temas que el sector venía reclamando. La medida, que conformó a parte de los productores -que también pedían financiamiento-, tuvo su contracara por el lado de los industriales que buscaban correcciones en las retenciones y reintegros a las exportaciones.
Lo informado por el Gobierno establece que ningún empleador va a pagar impuestos al trabajo por empleados que perciban hasta $17.500 y para aquellos que cobren por encima de ese monto lo van a hacer sólo por la diferencia.
Si bien falta ver la letra chica de la resolución, se entiende que las economías regionales alcanzadas son: uvas, tabaco, manzana y pera, cítricos, frutas tropicales y de carozo, secas, bulbos, brotes, raíces y hortalizas de fruto, yerba mate, maní, sésamo y jojoba.
También las productoras de vinos, azúcar, leche bovina, pescados de mar y crustáceos, muebles conservas de frutas, huevos, hortalizas y legumbres, arroz, yerba mate y jugos naturales, entre otras.
El beneficio alcanza en forma directa a 250.000 trabajadores, distribuidos en 24.000 empresas presentes en todas las provincias, con excepción de la Ciudad de Buenos Aires.
Desde el Ministerio de la Producción señalaron que para un salario promedio de $25.000, el aumento del mínimo no imponible a descontar significaría un ahorro en torno de los $2.000 por empleado durante 2019, es decir un 8% del costo laboral.
Sin embargo la medida no conformó a todos, dado que se creía que se habría un "muchos" cambios, pero terminó siendo sólo uno de los tantos temas que necesita el sector.
En ese sentido, el director Ejecutivo de Economías Regionales de Confederación Argentina de la Mediana Empresa ( CAME), Pablo Vernego, dijo que la entidad "avaló la medida puesto que somos mentores de la misma", pero alertó que "el costo no deberá irse muy alto como paso en su momento con la Ley Pyme, en donde se incluyó a muchas sectores que terminó siendo un perjuicio que pagamos todos".
El presidente de la Federación de Productores de Fruta de Río Negro y Neuquén, Sebastián Hernández, dijo: "estamos contentos porque es algo que pedimos dado que bajará el costo laboral ya que estábamos siendo asfixiados en este sentido y ésto no da una gran mano".
A diferencia de la industriales, Hernández adelantó que la próxima semana serán recibidos por el ministro Dante Sica para pedirle "la prórroga de la emergencia económica y aportes no reintegrables de $1.5 para la cosecha necesarios para cubrir la cosecha".
Distinta es la visión de la industria. El presidente de la Corporación Vitivinícola Argentina (Coviar), Ángel Lotta sostuvo "que si bien es una iniciativa que se pedía, la misma es un paliativo dado que no es lo que esperábamos". "Hoy tenemos un sobrestock vínico que hay que sacarlos y para eso hay que bajar las retenciones y reinstalar los reintegros a la exportación", destacó.
El jefe de Estado remarcó que la disposición "es producto centralmente del diálogo que tenemos con las cámaras que representan a las industrias y productores de todo el país".
Por su parte, el ministro Sica, afirmó que la medida "está dentro de las pautas que tenemos en el Presupuesto para cumplir con el equilibrio fiscal y nos permite empezar a trabajar en una agenda productiva enfocada en la salida exportadora y en las mejoras de competitividad transversal".