10/08/2012

Combustibles: el Gobierno quiere fijar precios iguales para todas las petroleras

En la inauguración de una planta de YPF, Cristina anticipó que los precios de los combustibles tendrán un “precio igualitario”. También confirmó un aumento en GNC. EL CRONISTA


El sector petrolero comenzó a sentir las primeras consecuencias del polémico decreto 1277, que amplía la intervención estatal en el mercado de hidrocarburos. Los valores que establecen las compañías para sus productos dejarán de ser libres como marcaba la ley hasta el momento. De ahora en más el Gobierno, a través de la Comisión de Planificación y Coordinación Estratégica del Plan Nacional de Inversiones Hidrocarburífera (CPCE) bajo la órbita del viceministro de economía, Axel Kicillof, fijará precios “igualitarios” para los combustibles.


Así lo anticipó la misma presidenta de la Nación, Cristina Kirchner, durante la inauguración de una planta de refinería de petróleo de YPF en la localidad de Ensenada, en la que aprovechó para reafirmar su respaldo a la conducción de Miguel Galuccio, quien estuvo presente y pronunció también un discurso, como cabeza de la petrolera. En el acto, de fuerte connotación política y colmado de esfervescentes agrupaciones afines al kirchnerismo –como La Cámpora, Kolina y movimiento Evita–, la jefa de Estado reveló: “Se van a fijar precios igualitarios en los combustibles de igual calidad para evitar que YPF abastezca a precios inferiores al resto del mercado”. La mandataria explicó que la decisión responde a uno de los puntos esenciales del nuevo decreto que es “garantizar el abastecimiento de combustible a precios razonables” y “asegurar una leal competencia en el sector”. En ese momento del discurso –interrumpido en varias oportunidades por fervientes aplausos y cánticos del público, que Kicillof reproducía desde el escenario–, aprovechó para apuntar contra la petrolera Shell, enfrentada con el oficialismo, a la que acusó de “quedarse con la crema del negocio” mediante el mecanismo de vender la nafta más cara dejando a la petrolera estatal a cargo de la oferta en otras regiones. Aunque no lo nombró, hizo alusión al presidente de la firma anglo holandesa, Juan José Aranguren. “A lo mejor, la medida no le gusta a alguna empresa en particular o a su titular, que en realidad es más como un jefe de la oposición o un dirigente político que un empresario”, ironizó Cristina.


Pero además, utilizó el acto para confirmar el primer paso de la Comisión y anunció un aumento de 300% en el precio del gas en boca de pozo para las empresas. De esta manera, ratificó que el metro cúbico pasará de $ 0,15 a $ 0,60 pero sostuvo que el incremento no llegará en forma plena a los consumidores. “En los próximos 30 días vamos a estudiar todas y cada una de las situaciones de las empresas estacioneras”. El aumento reportará a las empresas una rentabilidad de $ 900 millones, y a las provincias $ 119 millones, por las regalías. No obstante, la presidenta, categórica, aclaró, que “no se le regalará nada a nadie”. El aumento será a cambio de planes de inversión para la producción de gas.


Previo a su discurso, que se extendió por casi una hora y media, los gobernadores que integran la Organización Federal de los Estados Productores de Hidrocarburos (OFEPHI) firmaron un acta del “pacto federal hidrocarburífero” para allanar el camino a la titularización del 25% de YPF en manos de sus jurisdicciones. Estuvieron presentes los gobernadores Juan Manuel Urtubey (Salta); Jorge Sapag (Neuquén); Alberto Weretiklneck (Río Negro); Martín Buzzi (Chubut), Eduardo Fellner (Jujuy), Oscar Jorge (La Pampa); Francisco Pérez (Mendoza). Cristina estuvo acompañada por el jefe de Gabinete, Juan Manuel Abal Medina; los ministros de Planificación Federal, Julio De Vido, y de Industria, Débora Giorgi y el gobernador de Buenos Aires, Daniel Scioli.