28/02/2012

Advierten que las retenciones frenan el crecimiento del área con girasol

Son de 32% para el grano y 30% para el aceite; el Estado recauda US$ 200 millones. Por Fernando Bertello | LA NACION

Las retenciones a la exportación son una fuerte traba para que el girasol, el cuarto cultivo en importancia del país después de la soja, el maíz y el trigo, aumente su superficie sembrada, que en los últimos años tuvo un declive importante versus su potencial.

Así lo subrayaron productores y técnicos que ayer participaron de la primera jornada de la 18» Conferencia Internacional de Girasol, donde la Argentina, el tercer país productor del mundo detrás de Ucrania y Rusia, es anfitriona de este evento mundial.

Si bien las retenciones, del 32% para el grano de girasol y el 30% para el aceite, no figuraban en la agenda de un congreso con trasfondo científico, se instaló en las charlas de pasillo. El girasol, un cultivo clave para zonas agrícolas menos favorecidas que casi no tienen alternativas estables de producción de verano a este grano, tiene retenciones apenas por debajo de la soja, que tributa 35 por ciento.

"Son un impedimento sobre todas las áreas marginales de siembra, como el oeste de La Pampa, Chaco y Santiago del Estero", dijo a LA NACION Ricardo Negri, presidente de la Asociación Argentina de Girasol (Asagir), entidad sede y organizadora del evento mundial.

Negri afirmó que Asagir propuso al Gobierno avanzar en una disminución gradual de los derechos de exportación, hasta llevarlos al nivel del maíz, que hoy paga una tasa del 20 por ciento. En diciembre pasado, en una multitudinaria reunión con bolsas de cereales y otras cadenas de granos, el ministro de Agricultura de la Nación, Norberto Yauhar, dijo que no veía imposible una modificación para las retenciones a este grano. De todos modos, desde ese momento no hubo novedades oficiales sobre este tema.

Por retenciones a la exportación de este cultivo, el Estado embolsa poco más de 200 millones de dólares. Según Asagir, bajarlas al 20% representaría un costo fiscal "mínimo" de no más de US$ 70 millones. Con esa señal, dicen los productores, la superficie sembrada podría crecer.

"Sin duda que el área podría aumentar", subrayó Negri. Según la Bolsa de Cereales de Buenos Aires, esta campaña, cuya cosecha ya comenzó, se implantaron 1,8 millones de hectáreas. Es un crecimiento levemente mayor a los 1,7 millones de hectáreas del ciclo anterior. Para recordar, en 2007 el cultivo tuvo una siembra de 2,6 millones de hectáreas, 40% más.

La Argentina fue perdiendo el podio como productor. Su cosecha, que sería de 3,5 millones de toneladas esta campaña, ya es inferior a los 9 y 8 millones de toneladas, respectivamente, de Rusia y Ucrania. En esos países, el cultivo de girasol es casi como la soja para los productores argentinos: con restricciones a la exportación de cereales, allí se vuelcan a otra alternativa, en ese caso el girasol, para intentar eludir las trabas oficiales. Encima, lo siembran en las mejores tierras.

Con terreno perdido, hoy la Argentina está en el segundo lugar como exportador de aceite, desplazado por Ucrania.

En este contexto, las coincidencias entre los productores argentinos de que hay que bajar las retenciones al girasol son contundentes. "Con las retenciones te queda un ingreso por hectárea que complica el margen", señaló Luis Arias, productor de La Pampa. Arias remarcó que representan "un factor de peso" contra el incremento de la superficie cultivada.

ATAQUE DE PALOMAS

"Con las retenciones bajó el área y difícilmente la Argentina vuelva a ser el principal productor mientas se mantenga la estructura de retenciones actuales", destacó Santiago Sánchez, analista de Aceitera General Deheza (AGD) y asistente a la conferencia del cultivo.

Por si no fueran suficientes las retenciones, otro factor que está golpeando cada vez más la siembra de girasol viene del cielo: es por ataques de palomas que se devoran la producción en varias de las principales zonas del cultivo. En este congreso se analizaron diferentes técnicas para enfrentar la plaga.

A PUNTO DE DESCIFRAR EL GENOMA

MAR DEL PLATA.- El investigador canadiense Loren Rieseberg, de la Universidad de British Columbia, anunció en la 18º Conferencia Internacional de Girasol que antes de fines de 2012 estará completa la secuenciación del genoma del girasol. Según dijo ayer en un encuentro con la prensa, él logró avanzar en un 75%. Esto permitirá nuevos desarrollos para el cultivo: acelerar la velocidad de su mejoramiento y trabajar sobre resistencia a sequía y a enfermedades, por ejemplo. El genoma del girasol es de 10 a 12% más grande que el humano y 3,6 veces mayor que el de la soja. El proyecto empezó hace dos años, con una inversión de US$ 10,5 millones.