Luego de que técnicos del área extensión agrícola de las universidades de Oklahoma y Missouri detectaran la presencia de “chicharrita del maíz” (Dalbulus maidis) en cultivos de esas jurisdicciones de EE.UU., ahora esa temible plaga apareció en Kansas y está cada vez más cerca de la principal región maicera estadounidense. BICHOS DE CAMPO
Un informe del Departamento de Agronomía de Kansas State University señala que se confirmó la presencia en 26 condados de ese estado de plantas de maíz afectadas por Spiroplasma y del insecto vector de esa enfermedad (Dalbulus maidis).
“Se encontraron elevados niveles de incidencia de la enfermedad en maíces de siembra tardía y de segunda, lo que puede provocar una reducción del rendimiento”, indica el informe.
“En el pasado, la enfermedad del ‘achaparramiento del maíz’ se ha distribuido de forma limitada al sur de Texas, Florida y California en los EE.UU”, remarca el documento para resaltar que –tal como sucedió en la Argentina este año– la expansión territorial de Dalbulus maidis representa una novedad.
El “achaparramiento del maíz” o “corn stunt disease” es un complejo de patógenos trasmitidos por un insecto denominado Dalbulus maidis, conocido como “chicharrita del maíz”. Este vector transmite dos bacterias: Spiroplasma (Spiroplasma kunkelii) y fitoplasma del maíz achaparrado (Maize Bushy Stunt Phytoplasma o MBSP), y dos virus: Virus del Rayado Fino (MRFV) y Virus del Mosaico Estriado del Maíz (Maize Striate Mosaic Virus).
“Hasta la fecha, sólo se ha detectado Spiroplasma en los cultivos de maíz en Kansas; se necesita una investigación adicional para determinar la presencia de otros patógenos transmitidos por la chicharrita del maíz”, explica el informe.
Con la campaña maicera llegando a su fin, la posibilidad de que el Spiroplasma cause daños importantes en el presente ciclo en EE.UU. es casi nula. Sin embargo, será indispensable monitorear la evolución de las poblaciones de D.maidis en EE.UU. y las condiciones climáticas prevalecientes en 2025 para poder anticipar eventuales problemas productivos en el ciclo 2025/26.
Vale recordar que, de manera inesperada, este año la expansión masiva de la plaga por la región central argentina provocó pérdidas productivas de al menos seis millones de toneladas y, frente a las dificultades para controlar a la chicharrita, –vector del Spiroplasma– la siembra de maíz en 2024/25 registraría una caída significativa.