16/05/2019

La palmera nativa que produce 10 veces más aceite que la soja

A partir de este hallazgo, investigadores buscan crear un polo de producción de biodiesel, aceites y alimentos en el Noreste Argentino para reemplazar importaciones. Los detalles. INFOCAMPO
 

Desde la Agencia CTyS – UNLaM dieron a conocer esta investigación a cargo de profesionales del sector agropecuario. Esta palmera nativa (Acrocomia tota) también conocida como “cocotero”, es originaria de América y tiene una fuerte presencia en el norte del país, en Paraguay y en Brasil.

Indicaron que la misma podría convertirse en una novedosa salida productiva para el Noreste argentino debido al alto rendimiento en la producción de aceite, que es 10 veces superior al de la soja en la misma superficie.
 

“A los cinco años la planta inicia su etapa reproductiva y luego de unos años, cuando alcanza su madurez productiva, puede producir entre 4 y 5 mil litros de aceite por hectárea. Así, se convierte en un cultivo con un rendimiento 10 veces superior al de la principal oleaginosa de la Argentina, la soja”, explicó Diego Wassner, docente de la cátedra de Cultivos Industriales de la Facultad de Agronomía de la UBA (FAUBA).

Asimismo, remarcaron que el aprovechamiento de esta palmera no sólo resulta de interés para los pobladores del NEA, sino también para el sector industrial. “En el área de Corrientes, Formosa y Misiones se cultiva muy poca soja, pero la Acrocomia podría transformar a estas provincias en productoras de aceites y alimentos que abastezcan a la industria cosmética y alimenticia, a la vez que sumen opciones bioenergéticas”, sostuvo Wassner.

LOS BENEFICIOS

Lo que destaca es que todo lo que produce la palmera puede ser aprovechado y comercializado. El fruto, por ejemplo, tiene 4 componentes: la cáscara, la pulpa, el carozo y las semillas. De la semilla proviene un aceite rico en ácido láurico que es demandado por la industria cosmética, pero como en Argentina no se produce, se importa a pesar de su alto precio. 

De la pulpa se extrae un aceite comestible, rico en ácido oleico, que puede ser usado por la industria alimenticia o como bioenergía para elaborar biodiesel o biocombustible para aviación o biojet.

Sin embargo, su aprovechamiento no termina acá. “Después de extraer el aceite de las semillas queda una harina rica en proteínas, parecida a la de la soja, pero más barata y apta para uso en alimentación animal. Por su parte, la harina de extracción de la pulpa, el contenido de proteína es bajo pero posee una gran cantidad de almidón y azúcares que, si bien también puede ser apta para alimento animal, suele tomarse para producir Bioetanol como biocombustible” relató Wassner a la agencia.

El interés por abastecer a la industria del biojet surge a raíz de la demanda que la industria de la aviación presenta al intentar reducir sus emisiones de gases de efecto invernadero. Parte de la estrategia es usar cada vez más este tipo de combustibles, pero hoy en día no hay materia prima suficiente.

Imagen: Agencia CTyS

¿CÓMO IMPACTA EN LO AMBIENTAL?

Aseguran que además de los litros de aceite que produce, esta palmera también tiene otras ventajas. Es un cultivo perenne que genera una cobertura de suelo y aprovechamiento de recursos permanente durante el año y, además, es nativo de la región.

 

“Zonas que ya están desmontadas para la ganadería o la agricultura se podrían volver a vegetar con esta palmera nativa que, bajo su sombra, daría lugar a actividades como la horticultura o la ganadería”, destacó el Ing. Agrónomo.

La propuesta de Wassner también busca promover el “arraigo rural” al generar alternativas para productores chicos o empresas familiares que no pueden lidiar con cultivos ineficientes o que requieran mucha infraestructura.

“La Acrocomia impulsaría un nuevo sistema de producción ya que, en grandes extensiones, demandaría más mano de obra, pero en el caso de las plantaciones familiares el mismo productor se podría pagar sus jornales y generarse un sueldo sin necesidad de contratar gente externa”, explicó.

Imagen: Agencia CTyS

Por último, informaron que el grupo que lidera Diego Wassner llevó a cabo la primera experiencia de plantación e investigación con la Escuela de la Familia Agrícola (EFA) de la localidad de Santa Lucía, ubicada en Corrientes.

Allí se está comenzando a evaluar la genética de la palmera nativa para impulsar la siembra y el agregado de valor de esta palmera, que en Brasil y Paraguay se explota comercialmente con buenos resultados desde hace varios años.