No podrá estar en manos extranjeras el 15% de los predios rurales; se trataría hoy en Diputados. Por Gabriel Sued | LA NACION

El oficialismo en la Cámara de Diputados no cree en supersticiones, sino en el poder de su nueva mayoría. En el mediodía agitado de un martes 13, obtuvo ayer dictamen favorable a un proyecto de ley que propone poner límites a la compra de tierras rurales por parte de empresas o personas extranjeras.

La sanción de la iniciativa había sido reclamada por la presidenta Cristina Kirchner durante la ceremonia de asunción, el sábado pasado. Su deseo podría ser satisfecho en menos de diez días.

El objetivo general del proyecto genera coincidencias en casi toda la oposición, pero sólo los peronistas de San Luis y el bloque de Felipe Solá firmaron el dictamen promovido por el kirchnerismo. El resto suscribió dictámenes de minoría, que plantean que la regulación es facultad de las provincias, por ser las propietarias de los recursos naturales, y que postulan métodos alternativos de control.

La iniciativa, que seguramente obtendrá media sanción en la sesión que comenzará hoy, propone que la propiedad de tierras rurales en manos de extranjeros no podrá superar el 15% del total de esos terrenos en el país. Ese porcentaje máximo debería respetarse, además, en relación con el total de tierras rurales de cada provincia y de cada municipio.

Si el proyecto se convirtiera en ley, se establecería también un límite máximo para una misma persona o empresa extranjera de 1000 hectáreas en la "zona núcleo" (el sector más productivo de la pampa húmeda) o de una extensión equivalente en el resto del país.

INFLUENCIA DE LA FAO

El avance de la propuesta de la Casa Rosada se produjo luego de que se conoció un informe de la FAO, el organismo de las Naciones Unidas dedicado a la agricultura y la alimentación, que estima que actualmente entre un 5 y un 10% de las tierras rurales en la Argentina son propiedad de extranjeros.

"La Presidenta se anticipa una década en el cuidado del principal recurso que produce alimentos, que es la tierra", dijo, luego de que se emitiera el dictamen, el presidente de la Cámara de Diputados, Julián Domínguez, ex ministro de Agricultura.

Durante la reunión conjunta de las comisiones de Legislación General, de Agricultura y de Asuntos Constitucionales, el oficialismo destacó que el texto que se debatirá en el recinto se elaboró sobre la base del proyecto del Poder Ejecutivo, pero también a partir de contribuciones de diputados de la oposición.

La iniciativa original, por ejemplo, establecía que el límite de propiedad de tierras para extranjeros sería del 20% y no del 15%, como finalmente se determinó.

"De ningún modo, este proyecto puede ser interpretado como una actitud xenófoba. Es simplemente una forma de proteger un recurso natural no renovable", dijo, en la apertura de la reunión, el kirchnerista Luis Cigogna, titular de la comisión de Legislación General. Aclaró, además, que el proyecto no afecta derechos adquiridos.

PROPUESTAS ALTERNATIVAS

El primero en plantear críticas fue Ricardo Gil Lavedra, jefe del bloque radical y autor de un dictamen de minoría que delega a las provincias la tarea de fijar los límites de extranjerización de las tierras.

"Si bien tenemos diferencias, perseguimos el mismo fin. Esta ley es el principio de un proceso que debería terminar en una reforma agraria para combatir la concentración de la propiedad de la tierra", se sumó enseguida el también radical Pablo Orsolini, dirigente de la Federación Agraria.

Integrante del Frente Amplio Progresista, Liliana Parada consideró que el límite del 15% era insuficiente. "La FAO determinó que el porcentaje actual es del 10%, por lo que se está habilitando la compra de un porcentaje mayor", dijo la diputada, y reclamó que se suspenda la venta de tierras a extranjeros hasta que estuviera confeccionado un registro que prevé la ley.

Carlos Carranza, del Frente Peronista, cuestionó que la ley no tuviera en cuenta los tratados bilaterales de inversión. La respuesta contenida en la iniciativa es que la compra de tierras rurales por parte de extranjeros no será considerada como inversión, "por tratarse de un recurso natural no renovable que aporta el país que recibe la inversión".

EL DICTAMEN

Hacia adelante. El texto aprobado ayer en el dictamen por mayoría establece que no se afectarán los derechos adquiridos.
Restricciones. Se fija un límite del 15% para la propiedad de tierras rurales en manos de personas y empresas extranjeras (en su parte mayoritaria). El porcentaje se aplicará en cada provincia y municipio.
Máximo. Ningún extranjero podrá tener más de 1000 hectáreas en el sector más productivo de la pampa húmeda ni más de una cantidad equivalente en el resto del país.
RECLAMO DE ENTIDADES INDÍGENAS
Organizaciones indígenas y sociales rechazaron el tratamiento del proyecto de ley de tierras impulsado por el oficialismo y advirtieron que la iniciativa "es una grave provocación a los pueblos originarios". En una nota remitida a los bloques legislativos, el Consejo Nacional Indígena considera que previamente se debe dar jerarquía constitucional al convenio 169 de la OIT, que prevé la propiedad colectiva o comunitaria de las tierras, y desestima la representatividad del Instituto Nacional de Asuntos Indígenas, organismo descentralizado del Ministerio de Desarrollo Social. Acompañan el reclamo Adolfo Pérez Esquivel y Nora Cortiñas, entre otros.