AMBITO FINANCIERO
Bruselas - La Comisión Europea propuso ayer subir los aranceles a las importaciones de biodiésel de la Argentina e Indonesia, dos de los mayores exportadores mundiales del producto, a los que acusa de vender el biocombustible al bloque a precios deslealmente bajos.
La medida, considerada injusta por la Argentina e Indonesia, podría acabar con el comercio de biodiésel entre esos países y Europa, que ya se derrumbó desde de mayo cuando la UE fijó aranceles provisorios a los combustibles de esos orígenes. "La Comisión reveló el martes a las partes interesadas su propuesta final de medidas definitivas antidumping para el biodiésel de la Argentina e Indonesia", dijo una portavoz de la UE.
El ejecutivo de la UE había fijado en mayo aranceles provisorios de un rango entre un 6,8% y un 10,6% para las importaciones de la Argentina y entre cero y un 9,6% para las de Indonesia. La Argentina presentó en ese momento una queja ante la Organización Mundial de Comercio (OMC).
La portavoz de la UE no quiso dar detalles sobre los nuevos aranceles, pero el Consejo Europeo de Biodiésel (EBB, por sus siglas en inglés) dijo en un comunicado que eran de entre 215 y 250 euros (u$s 340) por tonelada de biodiésel importado desde la Argentina, y de entre 120 y 180 euros por tonelada para el biodiésel importado desde Indonesia.
De acuerdo con un representante de industria argentina, esas cifras significan tasas de entre el 22% y el 25%. "Esta es una medida injusta, no hay dumping. Es incomprensible el nivel del arancel y buscaremos el modo de defendernos de esta decisión", dijo el presidente de la Cámara Argentina de Biocombustibles (Carbio), Luis Zubizarreta.
Las exportaciones de biodiésel argentino a la UE alcanzaron 1,5 millón de toneladas en 2012, pero tras las medidas arancelarias caerán a sólo 500.000 toneladas en 2013, según Zubizarreta. "La industria argentina no va a poder exportar a Europa ni un litro, y los precios del biodiésel europeos van a subir. Generaron un ámbito de proteccionismo y el consumidor va a quedar atado a la industria ineficiente de Europa", añadió el titular de Carbio.
El ejecutivo señaló que la industria intentará volcar al mercado doméstico una mayor porción de su producción, pero que de ningún modo compensará la caída del mercado europeo. Con una capacidad de producción de 4,5 millones de toneladas, la demanda de biodiésel argentino caerá a un nivel de aproximadamente 1,5 millón de toneladas, de acuerdo con Carbio.
La Argentina es el primer exportador de biodiésel del mundo y junto con Indonesia es el origen del 90% de las importaciones del producto a la UE. La diferencia es que mientras que localmente se elabora el biocombustible con aceite de soja -del que es también el mayor exportador global-, el asiático lo hace a base del derivado de la palma.