Luxemburgo - Los ministros de energía de la UE acordaron el viernes limitar la producción de biocombustibles hechos a partir de cultivos destinados a la alimentación, en respuesta a las críticas de que elevan la inflación y perjudican más que benefician al medio ambiente.
La aprobación por parte de los ministros de un nuevo compromiso deja atrás el estancamiento de finales del año pasado, cuando los gobiernos de la Unión Europea no lograron cerrar un acuerdo sobre el límite propuesto del 5% en el uso de biocombustibles basados en cultivos como el maíz o el aceite de colza.
El acuerdo del viernes establecerá un límite del 7% en el uso de biocombustibles basados en productos alimentarios en el combustible para el transporte.
El nuevo acuerdo debe ser considerado por el nuevo Parlamento Europeo recientemente elegido. "Creemos que esta propuesta es mucho mejor que nada", dijo el comisario europeo de Energía, Günther Oettinger, en la reunión de ministros de Luxemburgo.
"Tenemos que apoyar la investigación y desarrollo en biocombustibles avanzados para que podamos pasar de la generación uno a la dos y a la tres", añadió, en referencia a los biocombustibles más sofisticados que no compiten con los vegetales que se cultivan para alimentos.
El límite propuesto del 7% es parte de un objetivo para obtener un 10% del combustible para el transporte de fuentes renovables para 2020, dentro de los esfuerzos para recortar las emisiones de gases de efecto invernadero y la dependencia de la UE del gas y petróleo importado.