En medio de una extendida aflicción por cómo resultará el desarrollo económico de la próxima campaña de granos gruesos, no está de más enterarse que un autorizado pronóstico coloca a la Argentina en el año 2020 cosechando tanta soja como Estados Unidos y Brasil. ¡Y para el 2030, Argentina lideraría la producción mundial! La Universidad de Illinois calcula que de los actuales 250 millones de toneladas se pasará a 370 millones en el 2030. El rinde deberá situarse por encima de las 4 toneladas por hectárea. Y para eso, conviene conocer los "7 factores del éxito en la productividad de la soja".
En medio de una extendida aflicción por cómo resultará el desarrollo económico de la próxima campaña de granos gruesos, en que cada día se agrega un dato que acentua la depresión de los precios futuros, puede parecer un contrasentido hablar de los "siete factores del éxito en la productividad de la soja".
Pero la agricultura, no es una actividad que se define "por el margen bruto de un año". Para el productor es su trabajo quizás de toda la vida y aunque su mayor preocupación está depositada en cómo gambetear las dificultades que ya están configuradas, no puede dejar de pensar en el mediano y largo plazo.
De allí que se justifique la identificación de esos "siete factores", como también tomar nota de que una autorizada prospectiva coloca a la Argentina para el año 2020 cosechando tanta soja como los líderes mundiales actuales, Estados Unidos y Brasil. ¡Y para el 2030, Argentina lideraría la producción mundial! Hoy, cuesta creerlo, pero así nos ven desde afuera. El rinde debirá situarse por encima de las 4 toneladas por hectárea.
Así como en la Jornada Maíz de junio, AGD presentó un trabajo que estableció los 7 factores que definen la productividad en el cereal, realizó un ejercicio similar durante la reciente 10ma. Jornada Soja Con Sustentabilidad de Córdoba, con la oleaginosa.
Fue presentado por el Gerente de Agroinsumos y Servicios Tecnológicos, ingeniero Esteban Tronfi. Su punto de partida fueron los acelerados cambios en que está inmersa la agricultura. Por lo pronto, para responder a "una demanda que no para de crecer, podrá haber años de más (demanda) y años de menos". En soja, se calcula que de los actuales 250 millones de toneladas se pasará a 370 millones en el 2030, con 50 millones de hectáreas adicionales dedicadas al cultivo en todo el mundo.
Revisar la toma de decisiones
Un "universo muy complejo de cambios" obligan entonces a "revisar el modelo de toma de decisiones". "Tenemos que lograr que la tasa de crecimiento del conocimiento acompañe a la tasa de crecimiento de los cambios: nuestro problema como agricultores es cómo convertirlo en curso de acción, en un lote sembrado", puntualizó.
Pensando en esa revisión, "no podemos salir todas las noches a contar todas las estrellas" sino las que guían nuestro derrotero. Y con esa idea se pusieron a trabajar para identificar los factores claves que definen la productividad de la soja.
Como en el estudio para el maíz, lo encontraron en Estados Unidos, que siembra más de 30 millones de hectáreas de soja. Y más específicamente en la Universidad de Illinois, dónde separaron "seis factores claves", tanto que "incluso los definieron como los 6 factores de éxito".
En soja, ellos son: Clima, Fertilidad, Variedad, Protección foliar, Tratamiento de semilla, Distanciamiento entre hileras.
Trabajando sobre ellos –a excepción del clima, que no se puede gobernar- lograron mejorar resultados: Fertilidad +8%; Variedad +6%; Protección foliar +7%; Tratamiento semilla +5%; Distanciamiento entre hileras +4%. La "interacción" arrojó una mejora promedio del 18%, traducida en producción, 7 quintales.
En la Argentina, 7 factores
Los técnicos de AGD procuraron adaptar el modelo, "no para imitarlo" sino para hacer una identificación de factores en el cultivo en la Argentina. Definieron que aquí son 7 y no 6. Y los separaron en "dos grandes grupos": tres son "de sustentabilidad" y cuatro de "prácticas agrícolas".
Los agruparon de este modo: Agua, Rotación y Biotecnología y Genética, los primeros tres. Fertilidad, Malezas, Tratamiento de la semilla, y Protección foliar, los cuatro factores de Buenas Prácticas. En las primeros tres, "en una empresa son decisiones de directorio, salvo el agua, no se toman en el campo"; las otras cuatro "sí se toman en el campo".
Yendo al terreno, el agua no define todo el resultado, no obstante que es un factor preponderante: años buenos rinden 20% más, años malos rinden un 15% menos (sin tomar en cuenta los períodos de extrema sequía, en que la caída puede llegar al 100%).
En la rotación Tronfi detalló que comprobaron que "un campo propio bien rotado rinde 20% y uno peor rotado, 15% menos". En campo alquilado, los números se dan vuelta: mal rotado rinde mucho menos.
En el rubro Biotecnología y Genética, el disertante reparó en que "se viene una ola muy grande de procesos de cambio en genética". Están anunciados de acá al 2020, 23 nuevos eventos en soja. Aportarán variaciones de importancia lo que obliga a estar atentos y con elecciones adecuadas y acertadas.
Asignaturas con malas notas
En Fertilidad, en la última campaña analizaron 300 lotes, encontrando un 20% de los lotes con deficiencia de fósforo, en 55% de zinc y 98% de azufre. "Tenemos en claro que hay mucha tela para cortar todavía en la fertilización", sentenció Tronfi.
En Tratamientos de semilla, la convicción es que la orientación es a"sembrar menos kilos de hectárea" para eficientizar costos. Hoy se dispone de alternativas en esta materia y el objetivo es que "debemos llegar a 40 kilos por hectárea y eso sin tratamiento (profesional de semillas) es imposible: nosotros decimos que cada semilla que ponemos en el suelo tiene que germinar".
En Malezas, el expositor fue categórico: en la Argentina, con 11 especies identificadas como resistentes "todavía no vimos nada", en comparación con las problemáticas de Estados Unidos con 240 malezas problema, Australia 61 y Canadá 59. "A pesar de que el tema nos preocupa mucho lo que viene puede ser mucho peor", alertó.
En Protección foliar, también se verifican fallas de manejo. "Nunca llegamos excelentes a cosecha", fue la consideración.
Dónde se define el partido
Los tres primeros factores, de sustentabilidad, definen el 70% del rinde de la soja y dentro de él, la mitad es el agua. Por tanto, sobre las otras dos, dependen de "decisiones de empresario, son estratégicas, de largo plazo, no se pueden evaluar por el márgen bruto de un año". "Son las que te ponen el techo de productividad", precisó el disertante.
Los cuatro factores de Buenas Prácticas, que influyen en un 30% del rinde, "te ponen el piso".
Tronfi concluyó reparando en que para producir más soja, también es necesario producir más maíz.