EL CRONISTA.

El intendente de Malvinas Argentinas, Daniel Arzani, aseguró ayer que la comuna apelará el fallo que suspende la construcción de una planta secadora de semillas de maíz de la empresa Monsanto en esa ciudad. “Nuestra decisión es obedecer y respetar las leyes. Eso hace que tengamos la tranquilidad de hacer las cosas bien. Veremos el por qué de esta decisión”, explicó a la prensa el jefe municipal de extracción radical. En ese sentido, Arzani destacó: “la Municipalidad de Malvinas Argentinas (la parte demandada en la causa), obedecerá la ley. Si hay que parar la obra, habrá que pararla”. “Nos reuniremos con el apoderado del Municipio y veremos cómo continúa esta situación”, dijo el intendente, quien anticipó que seguirán “todos los pasos legales que correspondan” y reiteró que, “si hay que apelar, se apelará” ante el Tribunal Superior de Justicia de Córdoba.

La decisión judicial fue tomada por la Sala 2ª de la Cámara del Trabajo de la ciudad de Córdoba, que ordenó en forma cautelar la suspensión de la aplicación de ordenanza Nº 821/2013, que daba vía libre a Monsanto para avanzar con la primera etapa del proyecto. El tribunal hizo lugar al recurso de apelación promovido por la Fundación Club del Derecho Argentina y, en consecuencia, revocó el fallo que había adoptado antes la jueza en lo Civil, Comercial, de Conciliación y Familia de Feria, Claudia Zalazar.

El 25 de enero pasado, la jueza Zalazar había ordenado prohibir cualquier obra vinculada con el funcionamiento de la etapa operativa del proyecto, aunque había permitido la realización de la obra civil, cosa que ahora también fue suspendida. No obstante, en la resolución difundida ayer, los camaristas Silvia Díaz y Luis Farías subrayaron que el principio precautorio que impera en la materia hace eje en cuestiones referidas a “riesgos ambientales” potenciales.