El titular de la BCR pidió al Gobierno cambios en el sistema comercial de trigo y maíz. AMBITO
El subsecretario de Agricultura, Marcelo Yasky; el presidente de la Bolsa de Comercio de Rosario, Cristian Amuchástegui; el subsecretario de Valor Agregado y Nuevas Tecnologías, Oscar Solís; la intendenta de Rosario, Mónica Fein, y el gobernador de Santa Fe, Antonio Bonfatti, se reunieron en el remate del primer lote de soja en la BCR.
El remate del primer lote de soja de la campaña 2011-2012 en la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR), un acto tradicional que da inicio formal a la comercialización de la oleaginosa, quedó en manos de la cooperativa Agricultores Federados Argentinos (AFA), que adquirió la partida de 28.040 kilos a un valor de $ 3.810 la tonelada.
En el remate, que estuvo a cargo de Marcelo García, perteneciente a la compañía corredora Enrique Zeni y Cía., estuvieron presentes durante el acto los subsecretarios de Valor Agregado y Nuevas Tecnologías y de Agricultura de la Nación, Oscar Solís y Marcelo Yasky, respectivamente; el gobernador de Santa Fe, Antonio Bonfatti; el presidente de la entidad anfitriona, Cristián Amuchástegui; la intendenta de Rosario, Mónica Fein; y el ministro de la Producción provincial, Carlos Fascendini, entre otras autoridades.
El lote que salió a remate fue una partida de 20.840 kilos de soja producidos en la localidad chaqueña de Colonia Elisa por el productor VMV Siembras Fideicomiso. Según anunció la firma Enrique Zeni y Cía., el dinero recaudado por la comisión del primer remate de soja será donado al Hospital de Colonia Elisa, Chaco, de donde provino la partida de soja.
Durante el encuentro Solís se manifestó a favor de «una producción con más productores y donde la diversificación del cultivo sea la alternativa que tengan los productores para obtener de ella su mejor rentabilidad». Y agregó: «Este año se van a ver afectados los volúmenes de la cosecha en parte por la seca que hubo y también por el nivel de manejo de sueldo en muchos lotes». Por eso, «lo que queremos destacar es la posibilidad permanente de diálogo con todos los actores y todos los sectores de la producción granaria».
Por su parte, Amuchástegui sostuvo que se requiere introducir cambios en el sistema comercial de trigo y maíz que permitan la competencia y la transparencia en la formación de precios en el mercado.
En su discurso, Amuchástegui volvió a insistir en «las dificultades que desde 2006 se observan en los mercados de estos cereales y cuyo efecto ha sido una menor superficie sembrada, con menor uso de tecnología, sin lograr el resultado perseguido de limitar el precio de los alimentos que derivan de estos productos».
En este sentido propuso que se introduzcan cambios en el sistema de comercialización de trigo y maíz. «Así se logrará un mayor oferta, un mayor ingreso de divisas, se permitirá al productor rotar sus cultivos y mejorar su técnica productiva, haciendo posible que esa liquidez de mercado actúe como moderadora de los precios de los alimentos, dada la mayor oferta en competencia».
El presidente de la BCR también hizo referencia a las dificultades con las que inició esta campaña agrícola por la fuerte sequía que castigó grandes zonas productoras, así como a la cuestión de los seguros agrícolas y la intención oficial de generalizar los seguros multirriesgo.