16/02/2012

Las empresas ponen reparos a un seguro obligatorio para el campo

Consideran que debe seguir siendo opcional aunque destacaron la decisión del Gobierno de ponerlo en agenda. Dicen que los subsidios incentivan la toma de coberturas. EL CRONISTA


Las principales compañías de seguros agropecuarios del país pusieron reparos a la idea de obligar a los productores a tomar seguros agropecuarios, aunque destacaron que el tema esté en la agenda del Gobierno.

El ministro de Agricultura, Norberto Yauhar dijo ayer que el gobierno evalúa la posibilidad de hacer obligatorios los seguros agropecuarios, después de que la presidenta Cristina Fernández exhortara a los productores a invertir en coberturas para no tener que pedir ayuda a Dios o al Estado,

Sólo el 6% del área cultivada en el país tiene coberturas multirriesgo –las únicas que aseguran contra sequía– y para ampliar ese porcentaje, el presidente de la Asociación Argentina de Compañías de Seguros (AACS), Francisco Astelarra, dijo que las empresas “van a acompañar” al Gobierno el proceso.

Aún así, desde los departamentos específicos del rubro agropecuario dentro de las compañías pusieron reparos.
El jefe de Riegos Agrícolas de La Segunda, Guillermo Rotger, indicó que “no es bueno que (el seguro) sea obligatorio porque la obligación es para todos”. De esta forma, explicó, las empresas se verán obligadas a asegurar a todos los productores, independientemente de sus prácticas agronómicas, el principal ítem que evalúan las aseguradoras para otorgar la cobertura.
“El productor lo tiene que comprar si quiere”, agregó y graficó que en España el gobierno subsidia el 50% de la prima, que se toma en forma opcional, pero en caso de siniestro, si el productor no está cubierto el Gobierno no le brinda ayuda.

Rotger destacó que el tema esté en la agenda del Gobierno porque “aplicar un subsidio para el seguro es necesario para que lo tomen prácticamente todos los productores”.

Por su parte, el gerente de Seguros Agrícolas de Sancor Seguros, Carlos Hoffman, tampoco estuvo de acuerdo con la obligatoriedad del sistema. “En general, en los países que pueden servirnos de ejemplo, el seguro no es obligatorio”, explicó.
Brasil es un caso, donde están subsidiados, pero sólo se pide certificación de cobertura para los préstamos que otorga el Banco Do Brasil, el mayor prestamista del sector agropecuario.

“Me parece muy bien que desde el Ministerio de Agricultura se convoque y se tome el tema con profundidad, pero hay que discutir las condiciones”, agregó Hoffman. En la lista incluyó la disponibilidad presupuestaria y si el sistema tendrá continuidad.
La Segunda y Sancor lideran el mercado con poco más del 35% del mercado nacional de seguros agropecuarios entre las dos, según la última encuesta de la Oficina de Riesgos Agropecuarios del Ministerio de Agricultura, correspondiente a 2010.
Para Jorge Bloise, responsable del Negocio Agrícola de Mapfre, que vendió en 2010 poco menos del 5% de los seguros agrícolas, “la gente tiene que optar libremente si quiere asegurarse”.

“En la medida en que el Estado se involucre habrá una solución” para que el sistema “beneficie al productor, a las compañías y al Gobierno”, agregó.

Desde otro lugar, el responsable del segmento agrícola de Mercantil Andina, Gustavo Appas, vio con optimismo las palabras de Yauhar, aunque destacó que hay que ver cómo se instrumentará.