La oferta por tonelada fue de 2450 pesos, 50 más que la cotización del viernes; en Chicago el cierre fue dispar, con avances para la oleaginosa y el maíz y caídas en el trigo.

Los cereales comenzaron la semana sin cambios en el recinto, mientras que la soja se negoció en alza en respuesta a las subas externas y la mayor necesidad de los compradores.

En el mercado de Chicago los futuros agrícolas cerraron con saldo dispar. La soja avanzó ante la firme demanda hacia la harina y el dato de inspecciones de embarques del Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA, por sus siglas en inglés), que se ubicó por encima de lo esperado, en dos millones de toneladas. No obstante, el volumen de operaciones se encontró por debajo del promedio habitual del mercado.

El maíz, por su parte, acompañó las subas de la oleaginosa, favorecido por el repunte de la demanda interna y externa. La posibilidad de que aumenten las exportaciones de los Estados Unidos a China continuó dando sostén a los precios, mientras se mantiene firme la demanda de destinos tradicionales como México, Japón y Corea del Sur.

En cambio, el trigo se ajustó en baja, reafirmando la tendencia del viernes pasado frente tomas de ganancias de los especuladores y el fortalecimiento del dólar y el pobre desempeño de los embarques de los Estados Unidos durante la última semana. En Rusia, que viene restringiendo sus exportaciones para proteger el mercado interno, trabaja en un esquema de derechos de exportación, como se informa por separado.

En el mercado local, la soja retomó la senda positiva, aunque los operadores fueron cautos a lo largo de toda la jornada. Según la Dirección de Informaciones y Estudios Económicos de la Bolsa de Comercio de Rosario, los habituales compradores no pronunciaron valores abiertos en el recinto, aunque un participante de la plaza deslizó un ofrecimiento de 2450 dólares por tonelada. Por oleaginosa de la próxima campaña tampoco se escucharon precios.

Según el Mercado a Término de Buenos Aires (Matba), el contrato para enero se ajustó en 290,50 dólares por tonelada, ganando 3,50 dólares, en tanto que para mayo el cierre fue de 250,80 dólares, con una mejora de un dólar por tonelada.

En las pizarras de Chicago, el contrato enero se ajustó en 381,49 dólares, repuntando 2,84 dólares, mientras que el correspondiente a marzo quedó en 384,25 dólares, siendo la mejora de 2,66 dólares por tonelada.

Por maíz disponible se pagaron 1000 pesos por tonelada en condiciones Cámara sobre Arroyo Seco con descarga inmediata, mejorando hasta 1050 pesos en enero y 1100 pesos grado 2 para febrero.

Por maíz de la próxima campaña hubo negocios a 140 dólares por tonelada con entrega desde marzo hasta abril sobre Puerto General San Martín y Arroyo Seco.

En el Matba el contrato abril se ajustó en 137 dólares por tonelada, perdiendo tres dólares, en tanto que el de julio cayó 3,50 dólares al cotizarse en 136 dólares por tonelada.

En el mercado de Chicago, los contratos marzo y mayo ganaron 49 centavos de dólar al cerrar, respectivamente, en 162,10 y 165,44 dólares por tonelada.

Respecto del trigo, la Bolsa de Cereales de Buenos Aires consignó que al cierre de su informe diario los molinos no habían dado a conocer valores en forma abierta sobre los habituales destinos de descarga.

La exportación, en tanto, ofreció 150 dólares sobre Bahía Blanca, 140 sobre San Martín y 130 dólares por tonelada sobre Rosario.

En el Matba, el ajuste para enero trepó un dólar al cotizarse en 130,50 dólares por tonelada.

En Chicago, la pizarra para marzo quedó en 229,93 centavos de dólar, 2,38 menos que el viernes, en tanto que en Kansas, para el mismo mes, la cotización fue de 241,68 dólares por tonelada, marcado una pérdida de 3,04 dólares por tonelada respecto del cierre anterior.

Por último, las fábricas de Rosario, San Jerónimo y Ricardone mantuvieron sin cambios sus ofrecimientos abiertos por el girasol, pagando 2150 pesos por tonelada. En General Deheza se manejaba el mismo precio en la condición flete contra flete.

PROYECTA RUSIA APLICAR DERECHOS DE EXPORTACIÓN

MOSCÚ (Reuters) - Rusia, uno de los principales exportadores mundiales de trigo, planea imponer un arancel sobre las exportaciones de granos, dijeron ayer algunas fuentes, una iniciativa que sigue a restricciones informales por medio de controles de calidad.
La medida forma parte de los intentos del gobierno de asegurar el suministro doméstico.
Rusia tiene una cosecha grande este año, pero la volatilidad del rublo y los altos precios globales hicieron que las exportaciones aumentaran con fuerza y el país ahora necesita sus existencias, dijo el primer ministro, Dmitri Medvedev.