La oleaginosa y el maíz sufrieron las consecuencias de un reporte más positivo de lo que se esperaba. El clima será fundamental la semana próxima para marcar tendencia. PAULA LÓPEZ EL CRONISTA

Los futuros de las materias primas experimentaron ayer un duro retroceso, de entre 6% y casi 2% para el caso del maíz y la soja respectivamente, luego de que el Departamento de Agricultura estadounidense (Usda) difundiera cifras por encima de las que esperaba el mercado tanto en materia de oferta como de siembra previstas para la actual campaña agrícola mundial.

El organismo norteamericano minimizó el impacto que la sequía en América del sur tendrá sobre la oferta futura de maíz y soja, al recortar de manera ínfima sus previsiones de producción para la Argentina y Brasil. Además aseguró que las reservas norteamericanas de ambos productos están por encima de lo estimado el mes pasado, lo que impactó de manera negativa a las cotizaciones de los commodities agrícolas.

El maíz fue el más perjudicado: 6,1% de retracción, hasta u$s 240 la tonelada, el menor precio en tres semanas. La soja también tocó su piso en 20 días: tras caer otro 1,8% –la tercera baja consecutiva de la semana–, se posicionó en u$s 435 la tonelada para entrega en marzo.

El trigo también operó en baja en Chicago, al perder el 3,5%, hasta u$s 222,30 la tonelada.

Pero los analistas consideran que el informe del Usda es, cuanto menos, optimista en cuanto a la disponibilidad de maíz y soja para los próximos meses. Es que, resaltan, el ente estadounidense hizo recortes leves en sus estimaciones de producción argentina de cosecha gruesa. Para el maíz, bajó de 29 millones de toneladas previstas en diciembre a 26 millones, una caída de 10% pero que los expertos consideran alejada de las pérdidas que habrá en realidad, estimadas entre 20% y 30%.

Para la soja, en tanto, el Usda calculó ahora que la Argentina logrará producir 50,5 millones de toneladas, 1,5 millón por debajo de la previsión anterior, que estaba en 52 millones y que para muchos analistas y operadores locales ya era una visión optimista en momentos en que ya se esperaba que el efecto “La Niña” golpeara a la producción local.

Además, sostuvo el Usda, para la cosecha de soja de Brasil se esperan 74 millones de toneladas, por debajo de las 75 millones del mes anterior, pero muy por encima de lo que estima el propio gobierno brasileño (en torno a 72 millones).
“El Usda suele dar malas noticias en cuotas, tanto cuando se refiere a lo que sucede con la producción de Estados Unidos como a la de América del Sur”, comentó un analista del mercado local.

Varios consultores creen que las bajas pueden repetirse en los próximos días, pero resaltan que el efecto “informe Usda” puede irse desvaneciendo a medida que se conozcan los reportes concretos respecto de la situación de los cultivos locales tras las escasas lluvias registradas entre el martes y el miércoles últimos.

En ese contexto, varios reportes meteorológicos dan cuenta de que las precipitaciones no lograron frenar el daño provocado por el estrés hídrico. Es más sostienen que los próximos 8 o 9 días serán críticos para el cultivo, más cuando se aguarda una nueva ola de calor y sin lluvias.